El SOEM reclamó el 15% con un “basurazo” en la avenida principal

La comunidad riogalleguense no tuvo tregua, ya que cuando ni siquiera se había familiarizado con el cese de la quema de neumáticos en el casco céntrico, otra modalidad empañó la jornada, afectando nuevamente los derechos de los vecinos.

Poco antes del mediodía, un grupo de trabajadores comunales, ataviados con sus mamelucos y muchos de ellos con sus rostros cubiertos, comenzaron a tirar las bolsas de basura en la avenida principal, cortando calles para posteriormente incendiar los residuos ante la mirada atónita de los transeúntes.

El “basurazo” tiene un antecedente histórico a nivel país y fue impulsado por el dirigente municipal Carlos “El Perro” Santillán en 1988 en San Salvador de Jujuy, hecho que marcó a fuego su carrera sindical y lo catapultó a la fama.

La redada no duró mucho. En apenas unos minutos grupos bien coordinados habían desparramado las bolsas por toda la avenida y sus alrededores, generando caos en el tránsito y el corte de las calles por el incendio intencional de los desechos hogareños.

Antes de culminar, un grupo se dirigió hasta el local comercial que posee la hija del intendente Raúl Cantín, a quien le depositaron basura en el ingreso del local y le recriminaron con epítetos de grueso calibre que su padre no tenga una respuesta al 15%, generándose momentos de nerviosismo en el interior de la tienda.

El sector comercial hizo saber su malestar a través de un repudio a lo que consideraron una “extorción” que innecesariamente afectó sus fachadas.

El presidente de la organización comercial, Marcelo Ferrero, repudió el endurecimiento de las manifestaciones de los afiliados del Sindicato de Obrero, luego de que ayer “provocaran un caos” en el centro de la ciudad arrojando basura en la vía pública, bloqueando calles y “generando temor en los ciudadanos, y en especial a los comerciantes” marcaron.
 
“Es incomprensible –agregaron- que el endurecimiento de esta medida de fuerza sea contra el resto de los ciudadanos, ya que los vecinos ni los comerciantes contamos con la herramienta para complacer su demanda y no somos los responsables de cumplir un compromiso asumido por terceros”, expresó Ferrero.

Aseguró que “esta forma de protesta tiene una total intención de perjudicar a toda la comunidad, con el alto riesgo de provocar situaciones de violencia y descontrol entre los ciudadanos” y remarcó que los comerciantes “sentimos nuestros vulnerados derechos y exigimos a las autoridades que correspondan en especial, al señor Intendente, al señor Gobernador que abandonen la postura de expectantes en la que se encuentran desde hace más de tres meses y cumplan con sus funciones respectivas, en el marco de la ley” por cuanto “exigimos que se restablezca la seguridad, salubridad e higiene que son derechos básicos que deben garantizarnos”.
Los comerciantes solicitaron que se retome una discusión que pareció haber quedado de lado relativa a la declaración de la emergencia de la ciudad.