La discapacidad como premisa para las campañas electorales

Desde el mes de abril de este año, la Asociación de Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA) se encuentra llevando a cabo la campaña “Síndrome Electoral” a través de la cual impulsa a los diferentes candidatos a incluir, dentro de sus promesas y proyectos electorales, políticas destinadas a mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad al igual que, a través de la misma, buscan garantizar el derecho al voto de las mismas.

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Sabrina Herreros, integrante de ASDRA, dialogó con TiempoSur y explicó que, por un lado, desde la Asociación transmiten a la sociedad que las personas con discapacidad poseen pleno derecho a ejercer el voto inclusivo: “La Agencia Electoral ha estado dando formación e información acerca de las medidas de accesibilidad para que todos puedan ejercer ese derecho. Queremos resaltar esto porque muchas veces se cree que las personas con discapacidad -sobre todo las personas con Síndrome de Down- no pueden votar porque no tienen un lenguaje fluido o porque no se manejan de manera autónoma y eso no es así. Nosotros ayudamos y transmitimos que hay que saber que tienen derecho a entrar al cuarto oscuro con un acompañante, a pedir información en la autoridad de la mesa y, si no tuvieran esta accesibilidad, deben acercarse a la autoridad de la mesa para reclamarlo”, señalando además que poseen prioridad al momento de ejercer el sufragio y de contar con un cuarto oscuro determinado para la accesibilidad. 

Herreros indicó que, por lo general, no suele haber problemas con este tipo de situaciones, ya que, con el pasar de los años, las personas y las autoridades de mesa se han ido formando e informando, al igual que “se han difundido todos estos ítems de cumplimiento de medidas de accesibilidad, pero, si apareciera esta dificultad, tenemos que ser nosotros también responsables de transmitir que esto tiene que ser reclamado ante la autoridad de mesa. Todas las personas con discapacidad tienen derecho a opinar y elegir y a ejercer su derecho ciudadano”, añadió.

"Síndrome Electoral"

La integrante de ASDRA explicó que, a través de la campaña “Síndrome Electoral”, se busca que todas las personas con discapacidad sean parte de la agenda y de las plataformas políticas para, de esta forma, “avanzar en el cumplimiento de los derechos que aparecen en la Convención de las Personas con Discapacidad. Nuestras propuestas tienen más que ver con acciones que sean fáciles de cumplir, ya que, por ejemplo, nos prometen una justicia mucho más independiente, pero sería más fácil de cumplir, prometer medidas que favorezcan a la independencia de nuestros jóvenes y las personas con discapacidad. Por otro lado, nos prometen un INDEC con estadísticas reales, pero sería más “cumplible” que prometan un CENSO real con preguntas concretas para así poder evaluar estadísticas acerca de la existencia de las personas con discapacidad, poseer una mayor accesibilidad y, sobre todo, contar con una nueva Ley de Discapacidad que sustente el modelo social y de la diversidad”, destacó Herreros. 

Por otra parte, la integrante de la Asociación de Síndrome de Down a nivel nacional señaló que otra de las prioridades que debe haber es el contar con una educación de calidad, teniendo en cuenta que el 48% de las personas con discapacidad que concurren a escuelas especiales no poseen otro nivel educativo más que ese debido a que “fueron rechazados de las escuelas comunes, lo que quiere decir que ni siquiera pudieron elegir esa opción. Queremos que se redoblen los esfuerzos para que no sean excluidos de sus derechos. Todo va a favorecer a una sociedad más inclusiva”, expresó. 

“Si nosotros en las escuelas convivenciamos con personas con discapacidad, esto le hará bien a las personas con discapacidad, pero también le hará bien a sus compañeros, esos compañeros que cuando sean adultos y sean tal vez dueños de una empresa o funcionarios ya van a haber convivido con personas con discapacidad y, en consecuencia, los van a querer emplear para conocer y poder darle los apoyos que necesiten para ser más empáticos con esta diversidad. Es todo un camino que hay que modificar para que todos tengamos un mundo, un poquito más justo”, agregó. 

Discapacidad y educación en Santa Cruz 

En el caso de la provincia de Santa Cruz, existe un nivel educativo muy limitado para las personas con discapacidad, por lo que, en el futuro, se les dificulta el ingreso al mercado laboral, ya que “no han sido formados, pero tienen el derecho de hacerlo”, puntualizó al mismo tiempo que señaló que tras la sanción de la Ley de Diagnóstico Humanizado -que se sancionó el 19 de abril- se debe trabajar “con una mirada más social, empática e inclusiva, ya que desde el momento del nacimiento se debe saber que la persona con discapacidad puede hacer muchas cosas si el entorno es empático, la favorece y le ofrece lo que cada uno necesita”, remarcó. 

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Por último, la integrante de ASDRA resaltó la importancia de contar con “escuelas inclusivas de calidad, para que el recorrido sea completo, que no termine en la mitad del camino, que puedan seguir eligiendo qué quieren estudiar, a qué se quieren dedicar o qué puedan hacer, pero sin los apoyos es muy difícil, no podemos depender de la buena voluntad de algunos docentes que van, se informan y buscan material, tenemos que armar una estructura educativa, de apoyo y tener estas demandas para todos”, concluyó.