Día del trabajador y trabajadora de prensa

Como ejemplo de este día, también se hace honor y memoria al nombre Rodolfo Walsh, la cara del periodismo en la última dictadura militar. Su figura surge del ímpetu en hacer que se conozca la razón y la verdad, contra las armas y la represión. El porqué de la certeza y la información concreta y justa. El hombre que firmó con sangre sus últimos textos, pero que no fue derrotado, ya que sus palabras perduraron en el tiempo. Es hoy el ejemplo que nos queda a los que nos destacamos en un medio, en una oficina o que hacemos conocer a las personas lo que pasa a su alrededor. 

Hoy no solo recordamos las figuras del pasado, si no a las del presente que transitan el país y las redes para informar a la sociedad. Es en la búsqueda incansable, en las corridas de un lugar al otro y en el constante aprendizaje.

Contra la censura y la condena de aquellos que desean saber la verdad. Contra la falsa realidad que a algunos le gusta apostar, que persigue un camino ficticio y sin rumbo. En los nudos de información poco precisa, que enredan nuestras mentes y nublan la visión del espacio que nos comprende. Contra eso trabajamos hoy, ayer y mañana, para que se sepa lo que en serio pasa, para eso está la prensa.

Entonces, la información debe circular y lo seguirá haciendo mientras exista la prensa y el periodismo. Por las radios, televisores, el diario impreso, por mail y las redes sociales. Hay que compartirla con nuestros amigos, vecinos, conocidos y familiares, en palabras de Rodolfo Walsh, “millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror. Haga circular esta información”.

En este día y muchos más por venir, feliz día.