Arte Rupestre: artesanías cien por ciento santacruceñas

“En 2002 empecé mis estudios en el Centro Polivalente de Arte y de manera paralela en la Escuela Municipal de Cerámica, pero luego por esas cuestiones de la vida, me incliné por la cerámica porque fue lo que en aquel momento me atrapó y me llamó la atención”, de esa manera inició el relato con NOS Verónica Corvalán, profesora de cerámica tradicional y artesana internacional, quien además remarcó que desde ese entonces sus estudios y labor estuvieron signadas por su deseo imperioso de mostrar a través de sus piezas de cerámica, los aspectos más relevantes de Santa Cruz, como son la fauna, flora, entre otros.

Si bien, el origen de esta historia tiene que ver con una búsqueda personal, la misma fue transformándose con el paso del tiempo en una fuente de trabajo. “Todavía recuerdo que hice mi primer horno artesanal y siempre tengo palabras de agradecimiento a Susana Suárez que fue mi profesora de cerámica. Ella fue quien me enseñó todos los secretos de este arte maravilloso que además presenta una diversidad de técnicas”, agregó. 

La marca - Descubrimientos

Al ser consultada acerca de la marca de sus piezas y el nombre del taller, comentó que se denominan “Arte Rupestre” porque se abocó a las pinturas rupestres, como una manera de mostrar lo más ancestral de la provincia de Santa Cruz, “Siempre tuve una inclinación muy especial por las cuevas y las pinturas y es así que me aboque a estudiar sobre esa temática. Me interesaron mucho, las fotografías y también fui a recorrer esos lugares que me permitieron canalizar mis interrogantes y dudas. Así fui descubriendo colores, óxidos y otros productos autóctonos”, detalló.

“La gente y sobre todo el turismo internacional, se interesa por los productos y piezas elaboradas con materia prima de la provincia y así lo pusieron de manifiesto cuando presenté la muestra “Plasmado en el tiempo”, en el Salón Iturrioz de Perito Moreno, o como ocurrió en la última edición de la Fiesta Nacional del Lago”, explicó.

En relación a la artesanía santacruceña dijo que la misma se distingue por la materia prima. “La arcilla y los engobes. Yo hago todo”, recalcó.

Además expuso que los productos artesanales más solicitados son aquellos que tienen que ver con el guanaco y la pintura rupestre, tal cual lo detalló anteriormente. Fuentes, cuencos, cuencos escultóricos, ceniceros, vasijas, son algunos de los productos que se elaboran en el taller.

Artesana internacional

Respecto a su reconocimiento como artesana internacional por parte de la UNESCO, Corvalán puso de manifiesto, que tuvo la oportunidad de participar hace algunos años; presentó cinco juegos diferentes de fauna patagónica en una convocatoria que le sirvió luego para presentar sus obras en una feria internacional. Las mismas se realizan año tras año en Córdoba o Buenos Aires. “A partir de esa participación en un evento internacional, uno ya queda registrado como artesano internacional. Por lo tanto, con el sólo hecho de participar a través de alguna iniciativa de la UNESCO y alguna feria internacional, ya somos considerados internacionales. Todos los años recibo la invitación para participar, más allá que algunas veces no puedo hacerlo”, enfatizó.

Taller

La profesora Corvalán cuenta con su propio taller, el cual está ubicado en Punta Bandera 675 en la ciudad de Río Gallegos, donde dicta clases a sus alumnos. “Siempre cuento a mis alumnos que empecé a trabajar en el lavadero de mi casa y por aquel entonces no tenía el equipamiento adecuado para trabajar. Todavía me acuerdo que tenía unas latas de leche, en las que elaboraba mis piezas. Y cuando terminé con mis cursos, tuve mi primer horno artesanal, hasta que llegue a tener el horno eléctrico”, recordó. La esencia del taller es revalorizar lo de Santa Cruz.

Además de dictar clases en su propio espacio, Corvalán dio clases a través de la dirección de artesanías de la Secretaría de Estado de Cultura.