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El colegio en el que 72 chicos murieron de HIV y hepatitis por culpa de un fármaco hecho con sangre contaminada

La investigación entrevistará a los padres de las más de 120 que murieron de sida y hepatitis con sangre contaminada. Fue el peor desastre en tratamientos en la historia del Servicio Nacional de Salud.

  • 21/06/2021 • 16:14

Entre 1974 y 1987, los alumnos del Treloar’s College ubicado en el sur de Inglaterra ofrecían un tratamiento para la hemofilia, una rara condición genética por la cual la sangre no coagula de forma adecuada (por falta de una proteína conocida como factor VIII y IX). Durante esos años, al menos 72 niños murieron después de que se les suministrara un fármaco contaminado con HIV y hepatitis viral.

Treloar’s College es un internado para niños discapacitados que cuenta con un centro especializado en hemofilia del NHS, dirigido por un equipo médico. Para mediados de los años 70, estuvo disponible por primera vez un nuevo tratamiento para esta condición conocido como Factor VIII/IX.

Es decir que aquellos con una forma severa de este desorden de la sangre podrían llevar una vida normal sin riesgo de desangrado. El NHS no era autosuficiente en el plasma sanguíneo que se utilizaba para fabricar el medicamento, por lo que lo importó del extranjero, sobre todo de Estados Unidos.

Los lotes que llegaron estaban contaminados con hepatitis A, B, C y más tarde con VIH. Miles de hemofílicos en todo Reino Unido resultaron infectados En 1985 lo llevaron a una pequeña oficina con un grupo de niños, donde le informaron que había dado positivo en la prueba del VIH, que en ese entonces era un virus recién descubierto sin tratamiento conocido y con una esperanza de vida corta.

Solo 32 de los 122 hemofílicos que asistieron a la escuela entee 1974 y 1987 siguen vivos hasta el día de hoy. La mayoría murió después de contraer VIH o hepatitis viral. En la investigación se intentará entender que sucedió en Treloar y el centro de hemofilia del NHS administrado desde la escuela.

Los lotes de sangre que llegaron de EE.UU. estaban contaminados, primero con hepatitis, luego con VIH. El centro de hemofilia en la escuela estaba dirigido por médicos y enfermeras del NHS y no por personal empleado directamente por la institución, que todavía se ocupa de niños con discapacidades físicas en la actualidad.