Conocer la cadena

Productores recorrieron el polo lanero de Trelew

Este Polo Textil Lanero es el más importante del país y recibe anualmente toda la producción santacruceña. Productores de la provincia visitaron y conocieron sobre la industria lanera con el objeto de poder mejorar el trabajo que se realiza en la producción en pos de una mejor materia prima y cumplir con los estandartes que hoy requiere el mundo.

  • 01/11/2021 • 12:49
Bobinado de lana patagónica.
Bobinado de lana patagónica.

A lo largo de la semana próxima pasada, dos grupos de productores santacruceños viajaron hacia la provincia de Chubut, más precisamente a la ciudad de Trelew, para conocer el polo industrial lanero más importante de la Argentina, lugar donde va a parar la totalidad de la producción de lana que se genera en los establecimientos de la provincia.

Este gran desarrollo productivo lanero tomó fuerza en la década del ’80, tiempos en los cuales se instalaron los primeros lavaderos y peinaduras de lana, aprovechando la amplia disponibilidad en la zona y la excelente calidad de la materia prima. Rápidamente Trelew se convirtió en el Polo Textil Lanero más importante del país, donde se procesa, actualmente, la mayor cantidad de lana del país.

En diálogo con TiempoSur, Emilio Rivera, responsable del Programa Pro Lana en Santa Cruz, el cual tiene como objetivo mejorar la calidad de las lanas que se producen en toda la Argentina, destinada en un 97% a la exportación, explicó que “en Santa Cruz existen alrededor de 350 establecimientos ganaderos adheridos al programa y certificamos entorno a los 6 millones de kilos sucios, lo que significa más o menos un 60% de lo que produce la provincia, y un 25% de lo que produce en el país”.

En relación a la visita que la delegación de productores realizó al Polo Industrial chubutense, contó que tuvo como principal meta “concientizar a los productores a cerca de la importancia que tiene hacer un buen trabajo de acondicionamiento de la lana en los establecimientos, previo al armado del fardo y enviarlo a la industria. Hay que prestar atención en las normas básicas de pro lana, evitar la contaminación, separación de las distintas clases de lana, dependiendo sus características”, entendiendo y alertando que “son cuestiones que si no se hacen en el campo, son casi imposible hacer en la industria y tiene un coto asociado”.

La mayoría de los productores no conocía el destino final de su producto. Sin dudas se llevaron un buen panorama y pudieron ver de primera mano lo que implica no hacer todo lo que se le pide en el establecimiento ganadero”, dijo y explicó: “Este proyecto se presentó al Instituto de Promoción de la Ganadería, que fue el organismo que financió la mayor parte del viaje, con el apoyo de la FIAS. Recorrimos todas las plantas laneras con sus particularidades, donde vimos el proceso donde la mayoría de la lana es lavada y peinada, lo que termina en bobinas que son las que se exportan. El producto final más elaborado que se está haciendo en Argentina”.

En otro tramo de la entrevista, remarcó que “la lana argentina claramente tiene muy buena calidad, tanto merino como corrediale, sobre todo Patagonia. Hay tareas que corregir en cuanto al acondicionamiento que tiene que ver con mejorar el trabajo en la cadena de producción. Seguir reforzando la limpieza de galpones de esquila, y a nivel mundial lo importante de la certificación de las lanas con protocolos que contemplen el bienestar animal. El 50% de la lana que estás demandando en el mundo tiene ya un certificado de bienestar animal, esto es importante y es una ventaja desde el punto de vista comercial, y en breve se espera que sea una barrera comercial. Es un mensaje que nos dieron claro, hay que trabajar con los productores para que trabajen en estos procesos”, cerró.

Vale la pena mencionar que los productores visitaron también una planta que hace tiempo intenta avanzar en el aprovechamiento de la fibra de guanaco, lo que como hemos expresado en más de una ocasión se presenta como una gran oportunidad de desarrollo a futuro.