El debate

“Nunca más a los abortos, ni clandestinos ni legales”

Así lo manifestaron desde la Mesa Federal de Pastores y Líderes de Argentina, sentando postura para rechazar el proyecto para la legalización del aborto en Argentina. “El niño por nacer tiene derecho a la igualdad de oportunidades”, indicaron.

  • 21/11/2020 • 13:17
La Mesa Federal vuelve a rechazar el aborto legal en Argentina.
La Mesa Federal vuelve a rechazar el aborto legal en Argentina.

El aborto legal volvió a tomar protagonismo en Argentina justo llegando a fin de año y con el proyecto ya presentado para ser tratado en sesión extraordinaria, la Mesa Federal de Pastores y Líderes de la República Argentina  expresó de forma pública su descontento con el tratamiento de la ley de interrupción voluntaria del embarazo, manifestando su enérgico repudio a la elevación al Congreso de la Nación, por parte del presidente Alberto Fernández, del proyecto de legalización del aborto, asegurando que se trata de “un proyecto que no tiene sentido y menos en esta época”.

En ese sentido, TiempoSur se comunicó con el pastor y presidente, David Olivera, como así también con el asesor legal, Sergio Macagno, quienes se encargaron de la confección de un comunicado oficial en el cual afirman que la Mesa Federal de Pastores y Líderes de Argentina, en su deseo de contribuir al real ejercicio de los derechos y garantías constitucionales de la familia, y de las niñas y niños que son las generaciones futuras, invita a reflexionar a los legisladores nacionales de todo el país, sobre el intento de consagrar el aborto como un derecho.
En diálogo con TiempoSur, David Olivera expresó: “No estoy de acuerdo y me parece que discutir la vida es un tema muy delicado. Hace dos años ya se votó en el Congreso a favor de las dos vidas y creemos que hay que crear mecanismos para ayudar tanto a la madre como al niño por nacer, pero discutir y solucionar problemas decidiendo quién vive y quién no, no es lo correcto ni lo que corresponde como país y como sociedad.

Lamentablemente lo están enfocando de una manera incorrecta, porque lo enfocan desde un problema de salud, cuando la realidad es que el problema de salud pasa por otro lado y acá hay otro tema, que es el valor a la vida”.

Luego agregó: “Si yo estoy de acuerdo con que la vida está desde la concepción, quién tiene autoridad para decidir quién vive y quién no. Lo paradójico es que el mismo gobierno presente un proyecto de ley para que aquellas madres que sí quieran a los niños reciban una ayuda económica y aquellas que no lo quieren, reciban una ayuda económica para matar al niño. Entonces, en pleno siglo XXI nuestro país tiene dos clases de niños: los que son amados que reciben apoyo y dinero del gobierno y los niños no amados, que reciben la muerte. Entonces, más que nunca tenemos que defender la vida desde su concepción y espero que nuestros senadores estén a la altura del cargo que se les dio para defender la vida de todos los argentinos. Los que estamos ahora y los que están por nacer”.
Luego, Sergio Macagno sostuvo: “Hay que advertir que el Código Civil marca a la concepción como el inicio de la vida, por lo que desde el momento en que los espermatozoides se unen con el óvulo para iniciar la vida, esa es la concepción prevista y como lo dice el comunicado, el ADN se define, da una identidad por la legislación vigente que en esta ley no contempla modificar el Código Civil y no se tiene presente que el aspecto propio del desarrollo de vida está amparado por derecho, porque ese individuo con ADN está amparado por nacer por el actual cuerpo legal”.

Luego agregó: “Al pensarse en este proyecto la semana 14, según los médicos, el corazón del feto ya habría latido 10 millones de veces, con lo cual es muy difícil pensar que no hay vida y por otro lado, dentro de los fundamentos que son muy contradictorios, se habla de cuestiones que avalarían al niño por nacer y se usan para argumentar el libre albedrío de aquellas madres que optan por el aborto, con lo cual es mucha la contradicción”.
Dijo que una de las cosas que se citan, son los convenios contra la tortura y el maltrato, pero “el punto es que un feto que tiene semanas de vida y tenga que ser abortado, claramente es una práctica médica en la cual tienen que seccionarle todos los miembros para quitarle esa vida que, de acuerdo al Código Civil, se presume que nacerá con vida. Es algo que está en el Código Civil de la Nación”, agregó.

 

El rechazo

Desde la Mesa Federal indicaron que el ADN que identifica en forma única e irrepetible a cada ser humano se encuentra presente a partir de la concepción, aunque advirtieron que “esto no es un postulado religioso ni ideológico, sino científico” y que esa característica brinda una individualidad y derechos.

“El niño por nacer tiene derecho a la igualdad de oportunidades y a ser protegido contra cualquier tipo de discriminación o selección, en razón de su patrimonio genético, etapa de su desarrollo, características físicas, biológicas u otras”, señalaron.

Ellos afirmaron que:

 

-Hay vida desde la concepción porque así la ciencia lo ha comprobado.

 

-Hay vida desde la concepción porque así lo establece la Constitución Nacional y las normas concordantes.

 

-Hay vida desde la concepción porque así lo creemos desde las confesiones de Fe.

 

También advirtieron que “miles de abortos clandestinos se practican anualmente en Argentina. Esta triste realidad es producida por la pobreza y la exclusión. Si sus entornos fueran “saludables”, muchas madres no tomarían esas trágicas decisiones”.

Señalaron que el Programa “Mil Días”, proyecto de Ley Nacional de Atención y Cuidado Integral de la Salud durante el Embarazo y la Primera Infancia”, con trámite legislativo 0012-PE-2020, es una propuesta que celebran y que felicitan a los autores.

 

Los argumentos

En el comunicado, la Mesa Federal detalló la situación que se generó a partir de que el Gobierno volviera “a promover el ya rechazado “Acceso a la interrupción voluntaria al embarazo y a la atención postaborto”, llamado “IVE”.

Sobre eso, expresaron: “¿Por qué rechazamos que se legalice la impropiamente llamada “IVE” -Interrupción Voluntaria del Embarazo-?: Porque es aceptar que cada año haya legalmente miles de argentinas y argentinos no nacidos. Miles de argentinas y argentinos que nuestro país necesita cada año. No se trata además de una “interrupción”, eufemismo con el que se intenta suavizar la cruel realidad del aborto: el embarazo termina con la muerte del niño o niña por nacer. No se puede luego reanudar. Y como dijo el propio Presidente “Una vida que se pierde no se recupera nunca más”. 

Además, invitaron a informar a la población las reales estadísticas, que no son las comunicadas por los promotores de la IVE. 

“Legalizar que las gestantes decidan libremente sobre la vida o muerte del ser humano que crece en su vientre es algo que viola la Constitución Nacional, la normativa concordante y las bases sobre las cuales se ha fundado nuestra Nación. Ellas merecen una solución superadora del aborto. La muerte de un inocente no puede ser nunca una solución”, sostienen.

Quienes elaboraron y acompañan esta postura afirman que en el futuro, “millones de argentinas y argentinos no desarrollarán sus vidas, no serán ciudadanos ni harán familia, serían eliminados, mediante prácticas sangrientas, como desaparecidos invisibles y silenciosos en democracia”.

Finalmente, recordaron que el “Día de los Derechos del Niño” se conmemoró el 61º Aniversario de la Declaración de los Derechos del Niño, citamos parte de su preámbulo: “El niño, por su falta de madurez física y mental, necesita protección y cuidado especiales, incluso la debida protección legal, tanto antes como después del nacimiento” e interpelamos a la sociedad toda, acerca de qué protección antes de su nacimiento le estaríamos brindando si el aborto fuera legal.

“Hoy y siempre diremos: NUNCA MÁS A LOS ABORTOS, ni clandestinos ni legales. La vida no se debate. Se defiende. Rogamos a nuestro Dios, fuente de toda verdad y justicia, que estas políticas dañinas dejen de ser promovidas, saludamos a toda la población con nuestra bendición en el nombre del Señor Jesús y nos encomendamos a Él”.

 

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