Especial

¿Cuál es la realidad económica que vive Argentina aun con antelación al COVID-19?

Por Mónica Claudia Pagliarani. 

  • 26/07/2020 • 12:42

Los argentinos estamos pasando por un proceso de estanflación, es decir, recesión con inflación, un problema que ya azotó a nuestra economía entre 1975 y 1988 y que terminó en la hiperinflación de 1989-1990. Por esa razón, si queremos salir de la estanflación, tenemos que volver al esquema conceptual desarrollado por los monetaristas y los teóricos de la economía por el lado de la oferta. Deberíamos imitar la combinación de política monetaria restrictiva y política fiscal expansiva, basada en la reducción de la presión impositiva, que impulsaron Volcker desde la Reserva Federal en 1980 y Ronald Reagan desde el Gobierno de los Estados Unidos en 1981.

Sin crédito público no puede haber moneda sana (ya que estamos emitiendo moneda sin respaldo).

Todo ello genera el impuesto inflacionario.

Con la inflación todos los argentinos son forzados a pagar el llamado impuesto inflacionario. El mismo consiste en la pérdida de valor de los pesos que todos tenemos en nuestros bolsillos como consecuencia de la suba de precios: Así como cuando uno paga otros impuestos se le reducen sus ingresos disponibles para el consumo, lo mismo pasa con la inflación.

La forma de impuesto inflacionario, que no se ve y no se puede evadir, es el que produce directamente la emisión de pesos, letras o bonos para cubrir los costos en intereses usurarios del endeudamiento tanto del Banco Central como del Tesoro Nacional.

Implementar una reforma monetaria que sanee la moneda y recree el crédito público será el primer gran desafío que enfrentará el gobierno que decida sacar al país de la estanflación, sea el actual o el que lo suceda.

Sólo demostrando que sabe cómo derrotar a la estanflación, conseguirá ese gobierno consolidar suficiente respaldo político y conquistar el apoyo popular necesario para encontrar soluciones a los muchos problemas económicos y sociales estructurales que azotan a nuestra sociedad y que se han agravado por la pandemia del Coronavirus.

Posibles medidas para salir de la estanflación

Las medidas “tradicionales” (tipos de interés, presión fiscal, gasto público, masa monetaria en circulación…) no son válidas en una situación de estanflación: Lo que sirve para paliar un problema aumenta el efecto del contrario.

• La reforma monetaria que se necesita para recrear una moneda sana (es decir que la emisión monetaria tenga el respaldo del Tesoro Nacional) y recuperar el crédito público.

Las principales fuentes del crédito son: a) el crédito de los individuos; b) el crédito de las instituciones financieras; c) el crédito de los bancos comerciales; d) el crédito del Banco Central.

No se puede recurrir al crédito del sector privado ya que está estancado. Los Bancos por el problema financiero no dan crédito.

• Un mercado único y libre de cambios, sin ninguna restricción a la compra y venta de divisas;

• La puesta en competencia de la moneda local con las monedas extranjeras en todo tipo de transacciones financieras y comerciales. Es decir, autorizar que todas la monedas sean de curso legal (al menos el peso y el dólar). Este régimen se denomina de convertibilidad flotante o de libre elección de la moneda.

• Una política monetaria que apunte a estabilizar el tipo de cambio y baje gradualmente las tasas nominales de interés, sin evitar la apreciación nominal del peso, clave para lograr la desinflación.

• El incremento de las exportaciones también es una viabilidad pero no depende a corto plazo del gobierno sino de la recuperación de los mercados externos.

• El gasto corriente hay que reducir drásticamente.

• El gasto en inversión pública es la que hay que incentivar.

• Para reducir la inflación se deberá reducirles los costos de producción a las empresas (disminuir costos impositivos y financieros, aumento de productividad por medio de la incorporación de nueva tecnología y aumento de la competitividad por medio de la innovación).

 

Como se desprende debe ponerse en marca una combinación de políticas monetarias, impositivas y de crédito donde todos los actores de la economía tengan cabida.

 

Cra. Mónica Claudia Pagliarani