“Fue una decisión difícil para la familia porque es toda una vida”

Sol de Mayo nació a fines de 1959, principios de 1960, gracias al esfuerzo y la visión de Augusto Gallardo y Susana Cárcamo, quienes luego de adquirir una pequeña vivienda ubicada en el fondo del terreno se dedicaron a realizar la ampliación en mampostería, la cual se preservó como fachada hasta antes del inicio de su demolición. Ubicado en calle 25 de Mayo al 100, fue una de las primeras viviendas de estas características en la zona, junto a La Casa de la Abuela Nieves, justamente derribada en enero pasado en la esquina contraria al bar.

La demolición había comenzado previo a la llegada del Coronavirus, lo que detuvo el trabajo por unas semanas, pero el pasado día lunes se retomó la labor, y con él se irán las memorias de muchos peones rurales que allí pasaron la invernada fuera su hogar, otras tantas se intentarán recuperar.

En este sentido, la Dirección de Patrimonio Cultural junto a la Dirección de Cultura a través del Archivo Histórico y Patrimonio Municipal iniciarán las correspondientes tareas de relevamiento planímetro, fotográfico, histórico y de memoria del viejo edificio. Ambas áreas se encuentran realizando tareas conjuntas en pos de preservar la documentación histórica de este bien patrimonial.

La directora de Patrimonio Provincial, Carla García Almazán, explicó que “los propietarios de este edificio decidieron demolerlo, por lo que dieron aviso a la Secretaría de Obras Públicas y tienen todo en condiciones para poder hacerlo”, y continuó: “La Municipalidad avisó a Patrimonio y en base a esto nosotros haremos un trabajo de relevamiento que tiene que ver con la planimetría, un relevamiento fotográfico del sitio interior y exterior, y ahora nos espera un trabajo de memoria oral con los propietarios del lugar, con la familia, con personas que puedan aportar datos históricos. De allí se arma un expediente, una carpeta y se archiva tanto en el Archivo Histórico Municipal como en el Archivo Provincial”.

Consultada sobre qué se podría hacer para preservar estos edificios, la funcionaria explicó: “El Estado no puede comprar cada antiguo comercio o vivienda, la única manera que tenemos de hacerlo es a través de la ley de expropiación que incluye la compra, pero el Estado no puede comprar todo, en este caso queda en la decisión del dueño”.

A modo de opinión y sensaciones, la Directora expresó: “Por supuesto que a uno no le gusta que vayan desapareciendo este tipo de edificios históricos, uno lo vive con tristeza, nunca es una buena noticia que pase esto, pero bueno, lo que está en nuestro alcance es hacer el resguardo de la documentación y la historia. Por lo menos quedará algo, el recuerdo, la fotografía, la historia”.

Quien también habló con TiempoSur fue Daniela Eugenio, nieta de los primeros dueños del Bar Sol de Mayo. “En realidad se quería reciclar, pero hablando con arquitectos y gente que se dedica a la restauración y carpintería nos dieron cuenta que no se podía hacer mucho”, lamentó al remarcar: “Fue una decisión difícil obviamente para la familia porque es toda una vida”.

En otro tramo de la nota, dijo que “la idea es tratar de reciclar y reutilizar algunas de las cosas del edificio: Puertas, ventanas, nos guardamos el cartel. Tenemos proyectado un local comercial, pero aún no sabemos qué vamos a hacer. Será todo a medida que se vaya pudiendo”.

En cuanto a lo que será la recuperación histórica, adelantó: “Fotografías no tengo muchas, yo no vivía acá y solo venía de visita, además ellos se fueron hace mucho tiempo y después lo empezaron a alquilar hasta la actualidad, que volvió la familia”. “Siempre recuerdo cuando era chica, venir a ver a mis abuelos. Recuerdo los juegos de dados y cartas en el bar por la mañana, siempre me tomaba una gaseosa”, recordó, al indicar que ahora empezarán un proceso diferente sin olvidar la historia del lugar.

*Tanto del Estado provincial como Municipal, autoridades de aplicación del Patrimonio Cultural, recuerdan a los arquitectos, ingenieros y maestros mayor de obra la obligatoriedad de dar aviso a las áreas de Patrimonio Cultural ante posibles proyectos de demolición en obras de más de 50 años, para la consecuente tarea de relevamiento. Ley 3138/10 de Protección del Patrimonio Cultural en el ámbito de la Provincia de Santa Cruz.