Política

Importaciones de gas: el eje Chile-Shell

El país inició la compra de gas desde Chile a un precio que supera en un 132 por ciento al gas que llega desde Bolivia. Las compras directas se realizan a través de dos regasificadoras del país vecino. Una de ellas es abastecida por British Gas, empresa propiedad de la angloholandesa Shell.

  • 22/05/2016 • 10:44

La Argentina no solamente comenzó a recibir gas importado de Chile al doble del valor que el mismo recurso traído desde Bolivia, sino que parte de las compras al país trasandino, que a su vez debe importar el gas porque no es productor, se realizarán directamente a Shell. Hace cinco semanas, TiempoSur destacó en esta misma columna que el principal proveedor del Gas Natural Licuado (GLP) procesado en Chile es British Gas, empresa que el pasado 28 de enero terminó de sellar un acuerdo de adquisición por parte de la angloholandesa Shell, por un total de 69 millones de dólares.

En Chile funcionan dos terminales de regasificación terrestres: GNL Mejillones, integrada por Codelco y GDF Suez, y Quintero LNG, cuyos accionistas son Enap (la empresa de energía estatal de Chile), Endesa, Metrogas y Terminal de Valparaíso S.A.

La Argentina importará desde Chile 5 millones de metros cúbicos diarios de gas por un plazo de tres meses. Los dos contratos directos, sin licitación, que empezaron a ejecutarse este mes, implican para el Estado nacional una erogación de 95 millones de dólares. El contrato con GDF Suez es por 73,4 millones de dólares, lo que equivale a pagar 7,2 dólares por millón de BTU, mientras que el rubricado por Enap (British Gas-Shell) es por 22 millones de dólares, equivalente a 6,9 dólares por millón de BTU.

El gas que comenzó a transitar por el gasoducto de 800 kilómetros entre Antofagasta, el norte de Chile, y la localidad de Pichanal, en la provincia argentina de Salta, es de origen noruego y fue transportado desde el sur de Francia hasta la planta de regasificación de Mejillones, en el norte de Chile. Este es el gas que llega a partir del contrato directo con GDF Suez.

Para el contrato con Enap se utilizará el Gasoducto Gas Andes, que une la localidad de Mendoza y la comuna de San Bernardo, en Santiago. Aquí opera la planta regasificadora Quinteros, alimentada por los barcos de la empresa British Gas. Es decir, Shell.

BG es el principal proveedor de GNL de Chile. El 28 de enero de este año, dos días antes de que el ministro de Energía, y ex CEO de Shell, Juan José Aranguren, sellara un acuerdo con su par chileno para la importación de GNL, la angloholandesa informó que su directorio había aceptado la adquisición de la inglesa BG por 69.000 millones de dólares. De esta manera, Shell se convirtió en el principal operador de GNL en el mundo.

En 2014, Chile ya había firmado otro acuerdo con BG para importar gas no convencional desde Estados Unidos, procesado tanto en la planta de Quinteros como en Mejillones.

 

Bolivia

El argumento del Gobierno nacional para comprar de manera directa gas desde Chile es que Bolivia no estaba cumpliendo con el contrato vigente entre ambos países. “Con Bolivia tenemos un contrato. Bolivia le vende a Brasil y a la Argentina y no tiene más gas, no nos puede vender más. El contrato dura 30 años, hasta 2027. En realidad, no está cumpliendo todavía la cuota que corresponde a este mes porque también ellos en el invierno lo necesitan”, manifestó el Ministro de Energía.

La respuesta del país vecino no se hizo esperar. El ministro de Hidrocarburos y Energía de Bolivia, Luis Alberto Sánchez, aclaró que ellos están cumpliendo con los envíos pautados y agregó que hasta el momento no existe una propuesta por parte de la Argentina para incrementar los volúmenes de gas. “Estamos abiertos a analizar nuevas propuestas de volúmenes con los hermanos argentinos. Nosotros hoy tenemos un contrato con Argentina y estamos cumpliendo a cabalidad de acuerdo a las nominaciones. Argentina nomina y nosotros cumplimos”, manifestó el funcionario boliviano, quien también confirmó que el precio que pagará la Argentina por el gas de Chile es mucho más caro que el boliviano.

“Es un gas traído de otro continente y hay un costo de regasificación en el lado chileno y hay un costo de transporte al lugar de destino final y evidentemente tiene un precio mayor al que tiene Bolivia actualmente”, argumentó Sánchez

El gas que llega de Bolivia se paga actualmente 3,1 dólares por MBTU. Es decir que por el gas traído de Chile, la Argentina pagará por este recurso un 132 por ciento más que el gas provisto por Bolivia.

Y si se compara con el precio del gas que llega por barco (4,5 dólares promedio) y es regasificado en las plantas de Escobar y Bahía Blanca, es un 53 por ciento más caro. Según el Gobierno, ambas plantas locales estarían funcionando al máximo de su capacidad aunque no existen datos fehacientes del ritmo de producción de ambas locaciones.

El otro argumento es que se traerá gas de Chile para dejar de comprar gasoil, que sí es más caro que cualquier otra opción (aproximadamente, un equivalente a pagar 10,3 dólares el millón de BTU).

 

Matriz a base de gas

La matriz energética de la Argentina posee una fuerte dependencia del gas. Del total de fuentes de energía utilizadas en las centrales térmicas instaladas en el país, el 72 por ciento es a base de gas, un 22 por ciento corresponde a combustibles líquidos, un 4 por ciento al carbón y otro dos por ciento a energías renovables. En cuanto a la producción de energía primaria por fuente, el 50,8 por ciento es a base de gas (Balance Energético Nacional, 2014). Actualmente, la Argentina importa 25 millones de metros cúbicos diarios de GNL. El 20 por ciento de esas adquisiciones pasarían a ser chilenas. Para dimensionar el acuerdo rubricado por ambos ministros, los 5 millones de metros cúbicos equivalen al 40 por ciento del consumo diario de la Provincia de Buenos Aires.

 

Claves

*La Argentina inició la compra de 5 millones de metros cúbicos diarios de gas a Chile.

*Por este recurso pagará 7,2 dólares el MBTU a la regasificadora GNL Mejillones y 6,9 dólares a Quintero LNG.

*El gas que llega a Mejillones proviene de Francia (GDF Suez), mientras que la regasificadora Quintero es provista por Shell.

*Según el Gobierno, se importará gas de Chile para evitar la compra de gasoil, que sí es más caro que el gas del país trasandino.

*Sin embargo, el gas que llega de Bolivia es mucho más económico que el chileno (3,1 dólares).

*Desde Bolivia indicaron que existe la posibilidad de vender más gas a la Argentina, aunque el Gobierno nacional no lo solicitó.

*En total, la Argentina pagará 95 millones de dólares cuando podría gastar la mitad.