Los factores históricos, religiosos y geopolíticos que explican la guerra en Israel

HISTÓRICO - GEOGRÁFICO: “Es una situación compleja, ya que se trata de un conflicto de larga data y de raíces muy profundas. Tanto, que incluso hay que retrotraerse a la Biblia para entender que esa tierra en disputa para el pueblo judío era la tierra prometida de Moisés. Este profeta, hace miles de años, liberó al pueblo esclavo judío de los faraones egipcios; abrió las aguas del Mar Rojo, llegó a esa tierra prometida y fundó su Estado”, dijo haciendo alusión a la pertenencia histórica de estos territorios.  

“En esta misma zona, existen poblaciones árabes y musulmanas desde que el islam apareció en el siglo VII después de Cristo, donde convivían pacíficamente. Pero, después de mucha lucha por parte de los grupos judíos y fomentado por la necesidad de ofrecer un espacio al diezmado pueblo por Alemania, luego de la II Guerra Mundial, la humanidad, representada por las Naciones Unidas, decidió entregarle un territorio, es decir, su tierra prometida, y se crea el Estado de Israel.  Para ello, se dividió la tierra en dos secciones, Israel y Palestina. De esta manera, se daría solución al tema de la población judía después de andar boyando por el mundo luego de ser masacrados en Europa”, narró.

“El drama surgió con todos los países árabes de los alrededores, que los atacaron constantemente, pero Israel repelió toda guerra triunfante”, dijo.

RELIGIOSO: “Una de las ciudades más disputadas entre los palestinos e israelíes ha sido Jerusalén. Esto se debe a que, sobre todas las piedras del mundo, en una de las tantas colinas de esta ciudad existe una roca que, según la tradición judía, es en la cual Dios le pidió a Abraham que mate a su hijo. Este casi lo hace, pero Dios lo frenó probando así su lealtad y fidelidad”.

“En esa misma roca, según la tradición musulmana, el profeta Mahoma se trepó a un caballo alado, subió a los cielos, y recibió de manos de Alá el Corán, su libro sagrado, y lo trajo a la tierra. Y como si fuera poco, a dos o tres cuadras de ahí murió Cristo crucificado. Esa es la sensibilidad de esa zona, en una ciudad tan antigua”, afirmó.

GEOPOLÍTICO Y ESTRATÉGICO: “Se trata de una zona muy sensible porque juegan los intereses de las grandes potencias. EEUU moviliza sus portaaviones; hay una base rusa cerca de Siria. Los turcos dominaban esta zona cuando eran el Imperio Otomano, etc.”, explicó.  

Sobre la gran pelea que justificaría dentro de Hamas los atentados tiene que ver con una división que existe dentro del mundo musulmán. Es que el Islam, la religión de los musulmanes fundada por Mahoma en el siglo VII, tiene dos ramas principales: los sunitas u ortodoxos, seguidores de los primeros califas sucesores de Mahoma, y los chiítas, seguidores del yerno de Mahoma, Alí. Sus diferencias son doctrinales y políticas.

“El tema es que Israel estaba por firmar un acuerdo de paz con Arabia Saudita, uno de los países más poderosos y ricos del mundo y que, encabeza la rama Sunita de los Musulmanes. Irán, es su archienemigo, líder de los chiitas y pretendía boicotear la firma de ese acuerdo. Este país tele controla los hilos de los terroristas en la Franja de Gaza y en el sur del Líbano, en la frontera de Israel. Allí, el Hezbolá autorizó o ayudó a que se cometieran esos atentados para boicotear esos acuerdos de paz”, añadió.

Cabe señalar que Hezbolá es un proyecto político religioso para Líbano financiado por Irán y es uno de los organismos más hostiles contra el sionismo (aquellos que cree que el pueblo judío debe tener su propio estado en la tierra prometida) en la región de Oriente Medio.

“Esta sería la explicación del porqué de tanto odio y tanta atrocidad pocas veces vista. Con el agravante de que Israel se maneja con en la Ley de Talión -Ojo por ojo, diente por diente- y en eso está. Entendemos que Israel está frenando algo más masivo y potente porque los terroristas se llevaron rehenes a la franja de Gaza. Y si bien no negocian con terroristas, están viendo la manera de rescatarlos”, indicó.

Para cerrar, hizo alusión al atentado en la fiesta tecno donde asesinaron a 270 jóvenes. “Los militantes extremistas de Hamas, impulsados por Irán, encontraron ahí lo que más odian: jóvenes divirtiéndose y no rezando. Y lo que es peor: chicas, mujeres libres en pie de igualdad con los hombres. Eso el mundo musulmán en su versión extrema lo aborrece. La respuesta es matar, degollar violar la libertad de la mujer”.