Jujuy

Gerardo Morales apuesta a sus contactos con Xi Jinping para comprar un millón de dosis en China

El gobernador diseñó un plan apoyado en sus vínculos políticos con Beijing, pero la empresa proveedora Sinopharm aún desconoce la operación comercial que pretende cerrar un grupo empresario chino en nombre de la provincia de Jujuy. 

  • 23/05/2021 • 08:53
Morales y Xi Jinping.
Morales y Xi Jinping.

Gerardo Morales desplegó toda su voluntad política, pero la iniciativa comercial puede terminar en desilusión. El gobernador de Jujuy cree que en “los próximos 60 días corridos” llegarán 500.000 vacunas para enfrentar en su provincia a la segunda ola del COVID-19. Un pronóstico que no se ajusta a los tiempos burocráticos de Beijing, a las decisiones empresariales de Sinopharm y a la capacidad de negociación del broker asignado por Morales que no tiene experiencia en la industria farmacéutica.

“Esto sólo lo podemos hacer nosotros, y nadie más. Tenemos una relación privilegiada con China y la estoy usando. Vamos a vacunar a todos los jujeños, y me van a quedar dosis almacenadas para la campaña 2022″, comentó Morales.

Morales conoce cómo funciona el poder y sos ciertos sus contactos en Beijing. Ha logrado acceder a un crédito inicial de 390 millones de dólares para instalar con la compañía Power China más de un millón de paneles solares en Cauchari (administración Mauricio Macri), y cerró hace pocos días un acuerdo con la empresa china Ganfeng Lithium para la instalación de una fábrica de baterías de litio (gobierno de Alberto Fernández).

Xi Jinping tiene una apuesta estratégica con Jujuy y Morales. China invierte millones de dólares en la producción de energía y el gobernador radical siempre defendió la agenda internacional de Beijing. Cuando sucedió el G20 en Buenos Aires, Morales pidió a Mauricio Macri la posibilidad de recibir a Xi en Ezeiza. Y así ocurrió.

Alberto Fernández escuchó la idea de Morales y decidió otorgar su aval institucional. Eso sólo significó que el embajador argentino en Beijing, Sabino Vaca Narvaja, presentara en la Cancillería de China un pedido formal de provisión de dosis de Sinopharm para abastecer a Jujuy.

El dossier oficial tiene una carta de la ministra de Salud, Carla Vizzotti, asegurando que la legislación argentina permite a las provincias adquirir vacunas contra el COVID-19. Y nada más.

“Nosotros apoyamos la gestión de Gerardo (Morales), pero todo es por su cuenta y orden. No negociamos, no pagamos, y no garantizamos su llegada a Jujuy. Lo único que hicimos fue firmar un documento que ratifica el derecho y la facultad de las provincias de comprar vacunas”, explicó un miembro del Gobierno a prueba de desmentidas.

El gobernador de Jujuy pagará las dosis al mismo precio que el abonado por la Casa Rosada. Y utilizará un grupo de empresas chinas para lograr que Sinopharm venda sus vacunas a la provincia norteña. Esas compañías con muchísima influencia en Beijing, ya iniciaron sus acciones reservadas para convencer a Xi y a la nomenclatura del Partido Comunista.

China utiliza la venta de vacunas como estrategia de geopolítica frente a Estados Unidos, y Morales es optimista respecto a su jugada sanitaria que es avalada por Alberto Fernández. “Va a salir. Estoy convencido”, dijo el gobernador radical.

En Beijing, no comparten el optimismo de Morales. Sinopharm no tiene intenciones de negociar con los intermediarios designados por el gobernador jujeño, y prefieren mantener las conversaciones acotadas al embajador Vaca Narvaja y la ministra Vizzotti.

Desde esta perspectiva, Morales depende de la decisión política de Xi Jinping: si avala la propuesta del gobernador opositor, las vacunas de Sinopharm llegarán a Jujuy. En caso contrario, la negociación continuará centralizada por Buenos Aires y Beijing.

Cuando Morales reveló su movimiento político-sanitario, un puñado de gobernadores de distintas latitudes y afinidades partidarias llamaron a China. Y la respuesta fue similar en todos los casos: bajen el nivel de expectativa.

En este momento, Xi privilegia a la sociedad china y suspendió los embarques de vacunas al exterior. Alberto Fernández asume esta circunstancia que excede su voluntad política y cree que Sinopharm cumplirá con Argentina a partir de junio.

Y si ello sucede, la prioridad pertenece al Estado Nacional.

Fuente Infobae