Tercera Ola

El pico de contagios que ya se atravesó y el descenso lento que traería “pequeños brotes”

Daniel Pryluka, médico Infectólogo y vocero de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) indicó que no hay un aumento exponencial de internación sino una acumulación debido a los contagios. El médico clínico Luis Cámera, uno de los asesores del Gobierno nacional, analizó que aunque bajaron los casos “la curva se amesetará en las últimas semanas y no habrá un descenso rápido”. Ambos profesionales disienten sobre la vacunación obligatoria.

  • 24/01/2022 • 08:48
“Nos estamos quedando sin personal médico porque nos estamos infectado todos”.
“Nos estamos quedando sin personal médico porque nos estamos infectado todos”.

Existe una acumulación de casos graves en las UTI de todo el país a causa del COVID-19, es decir, si cada día hay más de 100 mil casos y hay 100 internaciones diarias “después en algún momento habrá mil internados, por la acumulación de los contagios, pero no es que haya un aumento exponencial de internaciones, sino acumulación”, explicó a TiempoSur Daniel Pryluka, médico Infectólogo y vocero de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).

Este panorama fue advertido por la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva en los relevamientos que se realizan cada 15 días y que se suma a la gran cantidad de profesionales de la salud contagiados. Al haber menos médicos para las UTI, hay menos camas disponibles porque no hay nadie que asista a los pacientes.

Pero esta acumulación sucede en un leve descenso de casos en un enero con contagios récord para el país. (Santa Cruz en este mes en curso lleva más contagios que si se suman los meses de pico de casos en las dos olas anteriores).

“No me animo a decir que hay un descenso, hay que esperar algunos días, pero si hubo un leve descenso y no sabemos si es casual o una tendencia, así que hay que esperar un poco más”, consideró el experto.

Sí existe una clara baja de la letalidad producto de la vacunación. Pryluka ejemplificó que antes cada 100 mil infectados fallecían 2.500 personas porque la tasa era 2,5% “pero ahora fallecen 200”.

Por eso el referente de la SADI entendió que la vacunación contra el COVID debe ser obligatoria.

“Sí, yo la pondría obligatoria. Creo que se trata de un problema de salud pública y después la discusión pasa por otro lado. Y sino, hay que colocar tantas trabas al que no se vacune que deba vacunarse, como que no pueda ir al trabajo o usar el transporte público porque se trata de la solidaridad humana, así que la verdad no lo discutiría mucho”, precisó.

La ministra de Salud, Carla Vizzotti, por ahora descartó que el Gobierno nacional impulse la vacunación obligatoria, teniendo en cuenta que existe un proyecto de ley presentado por parte de dos legisladores del oficialismo.

Dentro de la comunidad científica y médica, hay diversas posturas. “No tenemos 30% de personas que no se quieren vacunar, es una población marginal, no sucede como en los países europeos o Estados Unidos”, aclaró, pero abundó que haría la vacunación obligatoria del mismo que se exige a los chicos el calendario completo de vacunas en el nivel Primario. “En Argentina las vacunas infantiles son obligatorias”, marcó.

 

Se quebró la curva 

Pero el médico clínico Luis Cámera, uno de los asesores del Gobierno nacional, opinó que la caída de casos es concreta. “Se ve que está bajando porque la curva se quebró y el pico ya lo pasamos”, opinó el especialista.

Lo que le preocupa al médico es de qué manera bajarán los contagios. 

“Tengo miedo de que el pico tarde en descender. ¿Por qué? Porque la gente no se cuida para nada y se ve en los centros turísticos como están amontonados (y sin barbijo) con una altísima contagiosidad”, analizó.

Detalló que estos mismos turistas luego retornarán a sus pueblos a lo largo del mes “y habrá pequeños brotes”.

“El ascenso de casos fue rápido, lo lógico que el descenso también. Las primeras semanas de marzo deberíamos estar igual que en diciembre, que es lo que plantean los epidemiólogo y virólogos. Pero mi olfato clínico me hace pensar que con movimientos turísticos en las grandes capitales, la curva se amesetará en las últimas semanas y no habrá un descenso rápido”, vaticinó.

De este modo -añadió- podría generar que en febrero, que debería ser el mes del gran descenso de los contagios “terminen habiendo más casos”.

“Si hay 100 mil casos diarios y baja a 80 mil, 70 mil y 60 mil es una cosa, pero muy diferente si baja a 99 mil, 98 mil, y así. Se dirá que los casos bajan, pero a la larga ese descenso lento hará que juntes muchos más casos a lo largo de febrero y eso puede hacer que las internaciones sean complicadas ya que nos estamos quedando sin personal médico porque nos estamos infectado todos”, advirtió.

Cámera dio el ejemplo de Santa Cruz, provincia que no cuenta con “miles de médicos”. “No es lo mismo Buenos Aires que Santa Cruz, porque allá se puede agotar enseguida el sistema de salud. Esto les puede pasar porque no hay muchos clínicos o terapistas”, adelantó.

 

No obligatorio, pero seducir

El asesor presidencial opinó -a diferencia de Pryluka- que no existe un contexto favorable para hacer obligatoria la vacunación contra el Coronavirus.

“Hay un momento social y político enrarecido y por eso apelaría a la persuasión, la seducción y hacerles ver las ventajas de la vacunación. De hecho hay 2.500 personas en terapia, que si hubieran estado todas vacunadas, habría 600. Me duele ver gente que se enferme más y la Ministra de Salud dijo que 7 de cada 10 fallecidos, son no vacunados y eso me duele porque hay 100 millones de vacunas y es una pena que se deje pasar la oportunidad”, sostuvo.

En las escuelas no impondría el pase sanitario “pero sí haría un control”. “Por eso temo que el descenso no sea rápido y lleguemos a principios de marzo con el inicio de clases con muchos casos aunque no sea el mismo contexto que antes ya que hay personas vacunadas. Y si estamos (en marzo) con pocos casos, es otra cosa”, distinguió.