Cruce al Gobierno

Dura advertencia de la CGT: "El riesgo de una crisis alimentaria está a la vuelta de la esquina"

La central obrera exigió "una respuesta activa y una actitud de compasión elemental" ante el hambre.

  • 06/02/2024 • 08:05

En ese sentido, la CGT advirtió que "es precisamente eso, lo que hoy sí resulta realmente 'urgente y necesario'".

"La situación de indigencia y pobreza estructural de millones de personas en extrema vulnerabilidad en nuestro país, no puede esperar. Especialmente en lo que se refiere a niños, niñas, adolescentes y adultos mayores. Constituyen un abanico doloroso de nuestro cuerpo social, castigado desde hace mucho tiempo por el flagelo de la inflación, con sus secuelas de miseria y deterioro, que gestiones gubernamentales desafortunadas o ineficientes no pudieron o no supieron encauzar para el bienestar de la enorme mayoría de la población", alertó.

 

Para la organización gremial, esta "fila del hambre muestra el rostro más cruel de los desafíos como dirigentes y, también, como habitantes naturales de una nación".

"'Un plato de comida no se le niega a nadie' es una vieja frase que representa nuestra más saludable tradición argentina. La Conferencia Episcopal Argentina va más allá, y expresa que 'el pedido del pan de cada día es un clamor de justicia'", manifestó la central obrera, en alusión a las recientes expresiones de la cúpula eclesiástica local.

A pocos días de cumplirse el segundo mes de gestión de Milei al frente de la Casa Rosada, la CGT se quejó de que "las distintas variables económicas de estos últimos días muestran datos alarmantes que se expresan, sobre todo, en el descontrolado aumento de los alimentos, los medicamentos y los servicios en general, componiendo un panorama inusitadamente crítico de cara a los meses venideros".

"El riesgo de una crisis alimentaria con imprevisibles consecuencias, está a la vuelta de la esquina. Si lo que va a regir es la 'ley de la selva', lo que sobrevendrá es un horizonte de mayor decadencia y desintegración", planteó.

 

Y concluyó: "Es preciso prestar debida atención a estas alarmas y prevalecer en el esfuerzo para curar, cuidar y compartir con los más débiles o desprotegidos, que es lo que nos constituye como comunidad. Por eso, es que advertimos: no es con la soberbia de cerrar las puertas a quienes reclaman, ni con la indiferencia de hacer oídos sordos a los que necesitan, como podremos encaminarnos en un marco de cordura y diálogo hacia las soluciones".