Desacuerdos en la cúpula de Cambia Santa Cruz

El armado político de cara al 2023 y las elecciones generales –donde se decidirá la futura gestión del gobierno provincial de Santa Cruz- comenzó mucho más temprano de lo normal. A menos de un año de los primeros comicios, varios son los actores políticos que empezaron a tender puentes, tantear nombres y empezar a formar estrategias. A diferencia de décadas atrás, con una política casi bipartidista, ahora el panorama electoral es mucho más frentista, con varios espacios conformando grandes alianzas a fin de sumar más votos. La Ley de Lemas propicia estas estrategias. Quizás sea los partidos de Izquierda los que se mantienen hasta ahora más hegemónicos en sus armados.

Una de las grandes incógnitas que se tiene de momento es que pasará con el espacio Somos Energía para Renovar (SER), encabezada por el dirigente petrolero y diputado nacional Claudio Vidal. Es que desde hace semanas ya es un hecho concreto la ruptura de Vidal con el Frente de Todos (tanto los sectores de SER como del Frente de Todos aseguran que no hay posibilidades de repetir la historia del 2019) y su llegada Cambia Santa Cruz.  La fotografía con algunos radicales, entre ellos el intendente mandato cumplido Roberto Giubetich, avivó más las teorías.

Pero dentro de Cambia las posturas son dispares. Mientras que algunos esperan a Vidal con los brazos abiertos, para otros, es el límite. En el centro está el “sí, pero”, con dirigentes que no quieren que sea el petrolero el que ponga las reglas del juego. Es que de ambos lados consideran que la única manera de llegar a Casa de Gobierno es un gran acuerdo para hacerle pelea al Frente de Todos para llegar al liderazgo en calle Alcorta.

Fue el actual senador nacional, Eduardo Costa, quien eligió ni más ni menos que la propia radio del dirigente petrolero (Radio Energía 94.7 Mhz) en el corazón del barrio San Benito, para asegurar que están "las puertas abiertas para conformar una alianza con Cambia para el 2023", con la posibilidad de seguir sumando espacios. El guiño a Vidal fue más que claro y contundente y ante la repregunta no escatimó en asegurar "claro que sí, los espacios que queremos transformar Santa Cruz tenemos que estar juntos, porque la gente no quiere más kirchnerismo. Y, además, la gobernabilidad necesita de gente para cubrir cada área del Estado. Deben estar todos".

Mientras Costa dejaba claro en la capital provincial su deseo de formalizar lo que ya es un secreto a voces en la política provincial, en contrapartida la que salió en Caleta Olivia a poner paños fríos y marcar la cancha, fue la legisladora nacional Roxana Reyes, quien dejó en claro quienes deben llevar la batuta de la oposición, al menos para ella.

"No existe ningún diálogo institucional con SER, ni de la UCR ni de la mesa de Cambia Santa Cruz" aseveró Reyes y echó por suelo un acercamiento con Vidal.

"Nuestros Intereses son claros: un cambio profundo y transparente que proponemos desde Cambia Santa Cruz para nuestra provincia", enfatizó en diálogo con FM Vanguardia en zona norte.

Para el espacio de la legisladora nacional no quieren que sea él quien ponga las condiciones y los últimos resultados electorales le sirvieron para sacar chapa y bajar las aspiraciones de una posible alianza.

Costa y Reyes son sin duda los máximos referentes de Cambia Santa Cruz y si bien generalmente se muestran en coincidencia sobre las decisiones del espacio, en esta oportunidad la eventual conformación de un frente con el petrolero, no parece tener una posición unánime.

Desde hace varias semanas, varios correligionarios de la provincia salieron a plantear públicamente su disconformidad con dicha posibilidad, ya que entienden que Vidal continúa representando con sus votaciones en la Cámara Baja del Senado, una cercanía con sectores del oficialismo.