De nunca acabar

Río Gallegos sigue siendo la capital del bache

Pasan los días, las semanas y las promesas, pero las calles de la capital provincial siguen siendo un interminable problema para los conductores. El Municipio no logra solucionar el principal reclamo de la mayoría.

  • 02/12/2018 • 11:10
Ejemplos de baches que complican el tránsito en la ciudad se encuentran con facilidad.
Ejemplos de baches que complican el tránsito en la ciudad se encuentran con facilidad.

Los conductores de Río Gallegos ya no saben qué hacer. Pasan los días transitando por calles en las que tienen que decidir si esquivar o transitar a paso de hombre por cada uno de los miles de baches que tiene la ciudad.
Los años pasan y los baches de las calles de Río Gallegos parecen ser parte del paisaje urbano que se niega a desaparecer y concretó la amenaza de expandirse debido al paso del tiempo.
Calles y veredas rotas donde el agua que se acumula en la superficie por las aberturas que poseen las calles dañadas, ya sea por obras públicas o por fisuras de la red, son parte de los inconvenientes permanentes de vecinos de los distintos barrios de la capital de la provincia.
Es por eso que los habitantes de la ciudad han hecho llegar sus quejas, contando que a menudo deben cruzar a por las arterias destruidas y hacer malabares para tratar de no romper su vehículo.
Si bien es cierto que el problema es de larga data, a poco de comenzar el último año de la actual gestión poco y nada se ha logrado al respecto y para prueba de ello sólo basta recorrer un poco la capital provincial.
Uno de los últimos datos duros sobre el tema se conocieron en 2017, cuando el concejal Medvedovsky presentó un proyecto por el tema luego que un equipo de trabajo relevara sólo una superficie de 8,6 km 2 de la ciudad, en los que detectaron más de 480 baches de diferentes dimensiones y grados de peligrosidad.
Tiempo después, el intendente Giubetich destacaría que en un año habían tapado 95, por lo que Medvedovsky indicó que “si en un año solo se arreglaron 95, si hacemos una proyección, llevaría más de cinco años reparar la cantidad de pozos relevados”.

 

SIN SOLUCIÓN
La situación de las calles de Río Gallegos amerita el histórico pedido para un trabajo de bacheo urgente, pero serio y sustentable por parte del Municipio, algo que nunca se llegó a concretar.
Se trata más precisamente de un trabajo de bacheo, base y sub-base con suelo cemento y la posterior compactación para rellenado con hormigón armado.
De esto se deben encargar los operarios de la División Asfalto que son quienes llevan a cabo trabajos de reparación de baches y sellado de fisuras en las arterias más afectadas.
Luego llegará el momento de analizar las causas por las cuales generalmente se realiza un trabajo de pavimentación, pero no del mantenimiento de las mismas.
Para esto, el Municipio deberá decidirse a invertir en serio el dinero suficiente como para reparar el prensado del viejo asfalto y la repavimentación de arterias que se tornaron intransitables.

COMO EN EL MUNDIAL
En los primeros días de agosto de este año, el intendente Giubetich presentaba a Paulo Croppi al frente de la Secretaría de Obras Públicas y lo hacía indicando que era “el Messi de la obra pública”, aunque parece que, hasta el momento, Croppi tuvo mismo desempeño que el verdadero 10 en el último mundial.
Croppi asumió en una de las áreas más delicadas en la comuna, el blanco fácil para las críticas de los vecinos, que constantemente reclaman por la situación de las calles, la proliferación de baches y el estado general de la vía pública. Algo que este nuevo funcionario tampoco pudo solucionar hasta el momento.

LO QUE QUIERE LA GENTE
Un dato no menor surgió de una encuesta “online” que TiempoSur-Digital lanzó a través de la página web en la cual se consultaba a los vecinos “Qué aspecto considera urgente a optimizar”.
De las seis opciones que se dieron, una fue rotundamente la más elegida por los usuarios y refiere a las calles y los baches. Votaron en total 4388 usuarios, de los cuales el 53% seleccionó la opción antes mencionada. Luego, con muchos menos porcentaje (16%) la siguieron la luminaria pública y la limpieza de calles.

EL PROYECTO QUE NO FUE
Entre las iniciativas no concretadas, una de la destacadas del año se dio durante la 13º Sesión Ordinaria del Honorable Concejo Deliberante, cuando el concejal Martín Medvedovsky presentó un proyecto de resolución donde solicita al Departamento Ejecutivo Municipal la creación de una aplicación inteligente que tenga funciones interactivas para: Identificar, localizar y denunciar la existencia de baches.
A través del mismo solicita al Ejecutivo Municipal la confección de un Plan Integral para la reparación de baches, en base a un relevamiento realizado durante el mes de mayo, que dio como resultado la existencia de más de 480 baches en una superficie de 8,6 km2 en Río Gallegos, según se señala.
En el momento de la votación, el bloque de Cambiemos no acompañó a la resolución, enviándolo al archivo,  alegando que “la ciudad es un desastre y no está preparada para el uso correcto de esta aplicación”.

LA OBRA DEL MOMENTO
Y si algo podía completar este coctel “anti-tránsito” por las calles de Río Gallegos es la obra de la Cuenca Sarmiento, que se extenderá por lo menos durante dos años más y que llamó la atención de los vecinos, quienes observan cómo las calles se rompen, pero no se arreglan con la misma velocidad, lo que genera todavía más problemas a los que ya todos conocemos.
Por el momento, desde el Municipio indicaron que están “próximos a iniciar ese plan”, ya que están “tratando de resolver un problema que ha tenido la planta generadora de mezcla en caliente para baches”.