Red de Mujeres Solidarias

Un comedor tuvo que cerrar ayer porque se quedó sin comida

Se trata del comedor que tiene la Red de Mujeres Solidarias que les da el almuerzo a más de 150 chicos. Ayer no tenían qué darles y tuvieron que cerrar. El Ministerio de Desarrollo les acercó víveres, pero la situación se complica porque cada vez se suman más familias con hambre.

  • 30/11/2018 • 08:36
Graciela Suárez y las integrantes de la Red de Mujeres Solidarias.
Graciela Suárez y las integrantes de la Red de Mujeres Solidarias.

Graciela Suárez es la fundadora de la Red de Mujeres Solidarias, un espacio que creció empujado por la demanda que se aceleró en los últimos tres años y que actualmente asiste a más de 150 niños.

Sólo este miércoles se sumaron cuatro familias nuevas, una de ellas con ocho hijos a los que el papá dijo que no alimentaba hace dos días. “Nos llamó a la noche desesperado pidiendo si los podíamos hacer entrar porque no tenía qué darles de comer” contó la mujer que justamente ayer tuvo que cerrar las puertas del espacio de calle 38 y 19 porque no tenía qué cocinar.

Angustiada, Graciela publicó en redes la noticia y los comentarios para ayudarla llovieron, aunque el mediodía ya estaba perdido.

“Fue lo peor que pudo haber pasado porque una cosa es que cerremos porque se colapsó el pozo ciego pero nunca porque faltó comida, no teníamos carne, ni huevo ni siquiera para hacerles un arroz hervido”, contó ayer en declaraciones a Tiempo FM.

Luego de que se conociera la noticia sobre el cierre del comedor ayer, las autoridades del área de Abordaje Territorial se acercaron con alimentos y también desde Desarrollo Comunitario del Municipio de Río Gallegos aseguraron que hoy estarían llevando comida.

“Tuve que escribir en el grupo de WhatsApp a las mamás que no íbamos a poder abrir, me dolió en el alma pero la verdad es que es lo que nos tocó vivir” dijo entre lágrimas Graciela que se sentía culpable por la situación.

En la mayoría de los casos, los chicos que van al comedor al mediodía tienen ahí su única comida del día. Antes que eso, en la zona había otro comedor al que los vecinos se acercaban pero cuando cerró “los chicos se empezaron a desmayar en la escuela, esto nos dicen las mamás” asegura.

Actualmente, cuando los chicos salen del colegio también tienen la opción de ir a merendar a la Red de Mujeres Solidarias, “toman la leche con lo que hay, a veces las mamás hacen pan casero y de ahí ya no comen hasta el otro día”.

Debido a cómo se van sumando familias en el último tiempo, las mujeres de la red organizaron para censar a las familias que concurren para ver cuál era el grado de necesidad que tenían. “Solamente dos familias estaban en condiciones de darles aunque sea un plato de comida a los chicos, así que pudimos sacar a cuatro menores del comedor”, informó.