Allanaron Camioneros

Robo de vacunas en Comodoro Rivadavia

Ayer hubo un operativo en las oficinas del Sindicato de Camioneros y también en las de la Obra Social. Se investiga si se vacunó a afiliados contra el COVID-19 por fuera del cronograma establecido. Además en Rawson se inició una investigación de oficio ante la denuncia de una trabajadora del Hospital Regional.

  • 20/02/2021 • 11:15
Andrea Rubio encabezó ayer una conferencia de prensa.
Andrea Rubio encabezó ayer una conferencia de prensa.

Dos allanamientos se realizaron en Comodoro Rivadavia en el marco de la investigación por el robo de 30 dosis de la Sputnik V en el Hospital Regional. En este marco, Andrea Rubio, del Ministerio Público Fiscal de Chubut, precisó que estos operativos que tuvieron lugar en la sede sindical y en la obra social de Camioneros se realizaron por información que lograron recabar momentos previos.

En el trascurso de la investigación se presentaron y se recabaron distintos testimonios que daban cuenta que en la obra social del sindicato de Camioneros se habían aplicado –presuntamente a afiliados- la primera dosis de la vacuna contra el COVID-19, y ayer se iba a aplicar la segunda dosis. Estos dichos fueron reforzados –dijo- por una serie de mensajes de celulares en donde surgían conversaciones con relación a este tema y en donde empleados de la obra social de Camioneros confirmaban que se habían vacunado, y así surgía la posibilidad que se aplicarían la segunda dosis.

Ante esta posibilidad se le solicitó al Ministerio de Salud de Chubut que responda quince puntos, que sería información vital para la investigación. Uno de los cuestionamientos era si la cartera sanitaria de la provincia mantenía algún convenio con asociaciones o mutuales, como para que éstos tuvieran acceso a la vacuna. La respuesta fue que no, que las vacunas eran recibidas por Salud y de ahí distribuidas a las distintas delegaciones de la provincia, ratificando así que no habían ningún tipo de convenio con sindicatos o mutuales.

Con esos fundamentos –mencionó- es que solicitaron al juez de Comodoro Rivadavia, Miguel Ángel Caviglia, una orden de allanamiento. Explicó que fueron a los dos sitios porque no conocían fehacientemente en dónde se habría realizado la vacunación.

 

Declaración cruzada

También ayer, pero en la ciudad de Rawson, el ministro de Seguridad de Chubut, Federico Massoni, inició una investigación de oficio por una denuncia de una trabajadora del Hospital Regional de Comodoro.

Según el titular de la cartera de seguridad de Chubut, en ese domicilio no se ingresó porque la enfermera era “un caso de COVID”. Esta aclaración la dijo porque la mujer, a quien la policía le allanó la casa el martes en el marco de la investigación por las vacunas robadas, denunció “me tiraron todo y me rompieron la puerta”, entre otras acusaciones como que le abrieron los paquetes de yerba y azúcar.

En ese sentido el funcionario indicó “de forma inmediata y de oficio, solicité una investigación. Se convocó al testigo civil de actuación que está presente en todo allanamiento, ya que hay uno en todos los casos”, apuntó.

Sobre las declaraciones donde la mujer habló de los destrozos que le generó en su casa el personal policial durante el allanamiento, explicó Massoni: “En las declaraciones, el testigo señala algo distinto de lo que menciona la denunciante. La mujer tenía COVID-19 y en esa casa no se entró. No se utilizaron los grupos. Fue la Policía a través de la División de Investigaciones a golpear las puertas y pedir que los atiendan”.

Sostuvo sobre el proceder policial: “No era necesario. No estábamos frente a delincuentes del narcotráfico o que tuvieran armas. Estamos en la búsqueda de ciudadanos para conocer la verdad. No hubo Grupos Especiales y no hay constancia en las actas”.

Y añadió: “Hubo una recorrida visual para preservar la salud de los policías bajo la orden del fiscal Caperochippi. Ella entregó el celular voluntariamente y lo colocó dentro de un guante de látex. Me llama mucho la atención y espero que no exista ningún tipo de cuestión detrás de esto porque surgió 48 horas posteriores a los allanamientos”.