Homicidio de Juan Manuel Padrón

Reconstrucción del homicidio

En la jornada de hoy se realizará la reconstrucción del homicidio de Juan Manuel Padrón en la vivienda de calle Jamieson al 600. Por otro lado, TiempoSur tuvo acceso exclusivo a las pericias psicológicas que el cuerpo forense realizó en cuanto a la personalidad de Juanma. Según aseguran Padrón era una persona dócil y evitaba los conflictos interpersonales.

  • 17/06/2021 • 10:45
Hoy se realizará la reconstrucción del hecho en la casa donde murió Padrón.
Hoy se realizará la reconstrucción del hecho en la casa donde murió Padrón.

A más de tres meses del homicidio de Juan Manuel Padrón, hecho ocurrido el pasado 6 de marzo en una vivienda ubicada en la calle Henry W. Jamieson al 600, hoy se realizará la reconstrucción del hecho, para establecer cómo sucedieron. Cabe señalar que la imputada no estará presente en la pericia, ya que se encuentra libre y residiendo en la provincia de Buenos Aires, en un centro de rehabilitación.

Por otra parte, ayer TiempoSur tuvo acceso a la pericia psicológica que realizó el cuerpo forense sobre la personalidad de Padrón.

Para poder realizarla se tomaron varios testimonios, entre familiares, amigos, allegados y compañeros de trabajo.  

Las pericias inician asegurando que Juan Manuel tenía un carácter sociable, mostraba gran apego a sus vínculos personales.

Los peritos manifiestan que Juan Manuel a lo largo de su historia ha mostrado una notable necesidad de aprobación y afecto, especialmente de sus parejas. Presentaba sentimientos generales de escaso autovalimiento y la tendencia a subordinarse a los demás, dando por seguro la superioridad de sus parejas. 

Más adelante las pericias marcan las características principales de la personalidad de Juan Manuel.

Temperamento: Se trataba de una persona dócil y no competitiva. Evita la tensión social y los conflictos interpersonales.

Dependencia interpersonal: Necesitaba de una pareja fuerte que lo cuide y sin esta se sentía indefenso. En su carácter intentaba ser conciliador y recurrir al autosacrificio.

Autoimagen inadecuada: Se percibía a sí mismo como alguien débil e ineficaz, tendía a infravalorar sus competencias y habilidades.

Estilo cognitivo: Revelaba una actitud ingenua o benigna hacia las dificultades interpersonales que intentan aplacar situaciones problemáticas.

No era violento

Otro dato que revela la pericia es que en Juan Manuel no se observaron indicadores que sean compatibles con los que suelen hallarse en sujetos que ejercen violencia física o psicológica. No obstante ello, en relación con la conducta de consumo crónico, podrían haber ocurrido en situaciones de descargas impulsivas en las que los mecanismos defensivos pudieran haberse encontrado sobrepasados y la reacción prime por sobre la reflexión.

A su vez, de acuerdo con los resultados obtenidos de la autopsia realizada a Juan Manuel, en donde se explicita desde el punto de vista lesionológico, se pueden distinguir dos grupos bien diferenciados. Uno las lesiones antiguas, que datan de seis meses respecto del momento de la autopsia y están representadas por cicatrices lineales que se localizan en el dorso, tórax, abdomen anterior y ambos miembros superiores. Las cicatrices son las consecuencias de lesiones inciso-cortantes provocadas con un elemento con filo como cuchillo, vidrio, botella rota o similar.

Relación de pareja

En otra parte del escrito hace referencia a la relación de pareja que Juan Manuel mantuvo con la madre de su hija, tanto ella como un vecino y una amiga manifestaron que no vivenciaron episodios de violencia, pero sí refieren por parte de Sofía características de violencia, acentuada inestabilidad emocional, así como también, malos tratos en la relación de pareja, pudiendo observar diferentes lesiones corporales y marcas, que en lo cotidiano presentaba Juan Manuel. Coinciden con la capacidad que él mismo habría tenido para minimizar y restarle valor a dichas situaciones conflictivas con su pareja.  

La pericia culmina especificando que de acuerdo a lo descripto es posible establecer una relación preexistente entre los elementos utilizados, su manejo y conocimiento por parte de Ávila el día 6 de marzo, y las diferentes situaciones conflictivas de pareja que habrían vivenciado durante la relación. Dichas situaciones tendrían como desencadenante las lesiones de antigua data en el cuerpo de Juan Manuel, la utilización de elementos cortantes como forma de agresión. Es decir que dicha dinámica acontecida el día del fallecimiento de Juan Manuel, no habría sido la primera vez que ocurriera. De este modo, se podría arribar a la conclusión que Ávila habría tenido cierto conocimiento acerca del grado de letalidad que presenta un elemento con esas características.