Río Gallegos

Presentaron protocolo de despedida de fallecidos

Ayer se realizó una reunión entre el intendente Pablo Grasso y el obispo Jorge García Cuerva. Fue a raíz del pedido de la Iglesia para despedir a los fallecidos. TiempoSur había dado a conocer la postura de la Iglesia días atrás.

  • 13/11/2020 • 08:42
Reunión entre Grasso y el Obispo.
Reunión entre Grasso y el Obispo.

Ayer por la mañana se realizó una reunión clave entre el intendente de Río Gallegos Pablo Grasso y el obispo de la diócesis, Jorge García Cuerva. Fue luego de un trabajo en conjunto entre las partes, donde el referente de la Fe Católica presentó sus inquietudes por el anterior protocolo de tratado de los fallecidos y presentara una propuesta superadora. La misma fue vista con buenos ojos por parte de la Comuna, quienes pusieron luego de algunos días, la nueva idea en marcha. Vale señalar que días atrás TiempoSur entrevistó a García Cuerva, quien se había manifestado a favor de una mayor celeridad de las medidas, algo que finalmente fue anunciado ayer. Luego de la nota publicada por este medio, se logró además el encuentro entre las partes, aunque vale señalar que ya había habido acercamientos entre el Obispo y el diputado por Pueblo Eloy Echazú, del espacio político de Grasso. "El día 16 de octubre en una reunión de Zoom le planteé la preocupación al diputado por Pueblo, Eloy Echazú. Nos dijo que presente por escrito el protocolo. Luego lo presentamos y adherimos al protocolo nacional que hay al respecto a la inhumación de cadáveres con COVID", indicó esta semana el Obispo a este medio.

 

Tras la reunión

Una vez terminada la reunión en horas del mediodía del jueves, el Obispo indicó: “Todos podíamos ver a los vecinos despidiendo a sus familiares desde lejos, llorando en la puerta del cementerio, una situación por demás angustiante. Queríamos reflejar en esta propuesta el pedido de la gente que atraviesa esta situación y que necesita despedirse. Había que darle un tiempo a la familia para ello”.

El referente de la Iglesia Católica agregó que en esta guía está detallado todo el proceso “desde que fallece hasta las distintas modalidades -que quedarán a elección de los familiares- en cuanto a la disposición final del cuerpo”.

Por su parte, el pastor de la Iglesia Evangélica Víctor Salinas destacó el trabajo en conjunto y la posibilidad que brindará este protocolo para poder despedir a los seres queridos. “La importancia de la integración entre las autoridades con las iglesias en busca del bienestar de la sociedad toda, es lo que primó en este acto. Estamos siempre abiertos a apoyar y sumar nuestro esfuerzo para dar mayor asistencia a las personas que pierden familiares”.

En este marco el Intendente señaló que rápidamente se accedió a la reglamentación de este protocolo, ya que considera urgente darles la posibilidad a los familiares de poder despedir a sus seres queridos en un momento íntimo y sentido.

“Le agradezco la presentación y el trabajo al obispo para poder ampliar la mirada, y contemplar estas situaciones, y el aporte de la Iglesia Evangélica, para que sea plural. Esto no tiene etiquetas, es el dolor de los vecinos y queremos que puedan despedirse como corresponde”, dijo.

 

Nuevo protocolo

Familiares o deudos disponen de hasta 48 horas para realizar la inscripción de la defunción en el Registro Civil.

-El cadáver de la persona fallecida debe introducirse en una bolsa plástica de alta densidad, impermeable y con cierre hermético, que reúna las características técnicas sanitarias. La bolsa debe estar debidamente identificada como material infectocontagioso.

-Los principios de precaución y dignidad humana se deberán cumplir en todo momento de la manipulación y traslado del cadáver.

-Todo el personal interviniente en el manejo, traslado y disposición final de los cadáveres asociados a casos positivos a COVID, deberán cumplir normas de bioseguridad.

-Los féretros serán bajados en la puerta de la capilla del cementerio local para su posterior servicio de responso del “último adiós”.

-Servicio funerario: Se autoriza a realizar una ceremonia de responso o exequias del “último adiós” en la capilla de cementerio, con una duración de 15 minutos y con una persona por cada 4 metros cuadrados útiles.

Disposición final: La disposición final de los cuerpos puede tener tres destinos de acuerdo a los ritos religiosos, las costumbres del lugar y/o las disposiciones judiciales emanadas de la autoridad competente, a saber: Cremación, Inhumación en nicho o panteón.

El protocolo es válido también para los fallecidos por otras causas (no COVID-19).