Coronavirus

Murió su madre en Formosa y no dejan que vaya a despedirse

Asi lo manifestó Carmen Acosta ,tras el fallecimiento de su madre a quien no pudo despedir , a pesar de estar al ingreso de la provincia de Formosa , “Los funcionarios políticos no ven el dolor de la gente a su alrededor”,apuntó .

  • 15/10/2020 • 15:01

La mamá de Carmen Acosta falleció este jueves en Formosa antes de que la docente que trabaja hace tres años en el Colegio Don Bosco de Rawson fuera autorizada a ingresar a la provincia norteña para verla, después de haber recorrido 3 mil kilómetros en auto. “Soy una hija con la desesperación de despedir a su madre”.

Carmen Acosta no pudo despedir a su madre luego de recorrer 3.000 kilómetros ,angustiada de pedir ayuda ya que necesitaba el permiso para salir de Chubut y llegar a Formosa.

Finalmente luego de varios llamados,coincidió en que  el propio Jefe de Policía Miguel Gómez de enterará de la difícil situación y  pidió su teléfono. Donde  se comprometió personalmente junto a otros funcionarios a ayudarle a llegar a despedir a su madre , quien sufría un cáncer terminal .

Así es que Carmen viajo pero por cuestiones burocráticas no pudo ingresar a la provincia ," pedí un minuto para despedirla", comento .Le pidieron un hisopado y quedaron de conectarse para avisarle y poder ir a ver a su mamá .Sin embargo hoy la llamaron para avisarle que su mamá había fallecido .

"Es muy duro, muy triste. Hay muchos familiares, muchos padres, muchos abuelos, muchos tíos, muchos hijos, sobrinos, que no pueden despedir a su ser querido”, recriminó Carmen en diálogo con el canal Todo Noticias.

“Los funcionarios no cambian, no tienen empatía, no ven el dolor de la gente alrededor. Tiene que ver un antes y un después, hay una ley que no se está cumpliendo”, fundamentó Carmen .

En ese sentido explicó “Soy una hija con la desesperación de despedir a su madre.El cuadro de mi mamá era muy grave, se lo dije a la Policía y a las autoridades que cada minuto contaba. Y para ellos no cambiaba si me dejaban pasar, pero yo iba a tener un minuto más con ella”.

Luego de esperar por varios días varada en una estación de servicio indicó ,“Me llamaron a las 3 de la tarde para avisarme que ya estaba mal y terminé ingresando a las 2 de la madrugada por cuestiones burocráticas”.

“Sé que para la estadística o un censo soy un número más, pero necesitamos que esto cambie, hoy me tocó a mí, pero mañana será una mamá que necesite despedir a su hija.Estamos en octubre y todavía seguimos con un montón de cosas. Necesitamos una Argentina mejor, funcionarios empáticos, que miren al costado y vean la realidad”.