Final anticipado

El fin de la cuarentena estricta por el coronavirus y el comienzo de la etapa administrada, parece haberle permitido a los dirigentes deportivos visualizar algo de luz al final del túnel. De ahí, quizás, que muchos hayan estado trabajando en los últimos días buscando la manera de reactivar su rubro. Comenzaron las reuniones y las lluvias de ideas. Así fue que surgieron rápidamente los primeros protocolos de seguridad. El pádel armó el suyo. Lo hizo a través de la Federación Internacional. Mismo caso se dio en el golf. En el tiro, la cosa fue algo más doméstica. Al menos por ahora.

La cosa no quedó ahí, con la idea en mano, los dirigentes deportivos tocaron a la puerta de sus pares gubernamentales. Todos con un mismo objetivo. Volver a la acción. Siempre de manera controlada y bajo estrictas normas de higiene. La idea general es seguir luchando contra la propagación de la enfermedad al tiempo que le permita a las entidades deportivas sobrellevar el difícil momento económico, principalmente, por el que atraviesan. Sin actividad no hay ingresos y sin estos, tampoco existe la posibilidad de cumplir con los compromisos salariales o los pagos de alquileres o servicios.    

Pero no todas las disciplinas cuentan con esta posibilidad. Los que se adelantaron en el pedido de su reactivación fueron aquellas de tintes individuales o en donde la acción no requiera de un movimiento grande de personas. Las otras, todavía, deberán esperar. Aunque no todas disponen del tiempo como para poder hacerlo. La pesca deportiva es una de ellas. Esta estuvo, durante un tiempo, no sólo peleando contra la pandemia sino también contra el calendario. Por dos sencillas razones. La primera, la temporada de pesca deportiva tiene fecha de vencimiento. Hasta el último viernes, 1° de mayo, los amantes de este deporte estaban habilitados por el organismo gubernamental correspondiente para poder tirar sus líneas al agua. Además, se les viene el invierno, otra de los limitantes habituales de la actividad.

Con lo cual, el panorama para la pesca deportiva no es el mismo que para las restantes actividades. Eso es algo que tienen en claro en Pescazaike, por ejemplo. Tanto es así que los dirigentes de dicha entidad están ahora trabajando pero no para la reapertura de la entidad sino para el cierre de la misma. En principio, hasta septiembre. Aunque habrá que ver cuál es la evolución de la pandemia para ese entonces.

Respecto a la decisión del club cuya sede principal se encuentra en Güer Aike, habló su presidente en forma exclusiva con TiempoSur. A continuación, la palabra entonces de Horacio Hospitaleche.

- Ahora que se empieza a flexibilizar la cuarentena muchos deportes e instituciones están pidiendo por la reapertura y la vuelta a la actividad, ¿ustedes tienen pensado pedir por lo mismo?

La situación para nosotros es un poco diferente quizás que para el resto. A nosotros todo esto nos agarró en el final de la temporada. Habitualmente tenemos actividades hasta mediados de mayo o principios de junio. Después, ya cerramos el club porque por el tema del frío, la escarcha y demás cuestiones relacionadas con el clima del invierno, no va nadie al camping. Con respecto al salón de eventos, éste también está cerrado. En ese caso, iremos viendo lo que dicen las autoridades y la idea es reabrirlo cuando nos dejen. Teníamos varios pedidos ya hechos. Suspendimos todo ni bien se decretó la cuarentena. A algunos les devolvimos la reserva y otros prefirieron mantenerla. Con éstos, tendremos que hacer un nuevo acuerdo de fechas en cuanto podamos dejar atrás el aislamiento.   

-Sabemos que todo esto afectó a la parte social y competitiva del club. En cuanto a lo económico, ¿cómo está eso?

Nosotros dependemos de las cuotas. Ahora no las estuvimos cobrando porque no queríamos molestar al socio. Entendiendo también la situación. Pero tenemos claro que en algún momento vamos a tener que cambiar eso y a necesitar de cobrarlas porque nos permite sobrellevar los compromisos que tenemos asumidos. Por ejemplo, con el sueldo del campero o el pago de los servicios. Por suerte, y pese a que no fue una buena temporada, hoy no tenemos ningún problema con eso. Estamos al día con todo.  

-¿Qué pasó con la Copa Challenguer?

La temporada de pesca terminó el pasado viernes. Nosotros habíamos suspendido la competencia antes por el tema este del coronavirus. Nos quedaron por realizar tres o cuatro concursos de los previstos en el calendario. Por cómo viene la mano, no vamos a tener la posibilidad siquiera de hacer alguna actividad en donde podemos premiar a quienes hasta el parate, fueron los mejores de la temporada. Con la Comisión Directiva todavía no tratamos el tema en detalle. Lo que está claro es que damos por finalizada la Copa. Ahora tendremos que ver y pensar en función al segundo semestre. Veremos si para ese entonces podemos terminar lo que nos queda del calendario o no, y entregarles los premios a los ganadores. También existe la posibilidad que el nuevo certamen arranque con los puntos que tenían acumulados los pescadores hasta que se decretó el aislamiento. Son cosas que tendremos que ver en Comisión. Ahora ya más tranquilos y sin urgencias en cuanto a los tiempos.