En Chapelco jugaron

Desde hace un tiempo ya que los golfistas de nuestra ciudad tomaron el hábito de salir a jugar fuera de la ciudad. El Calafate, en su momento, fue uno de los destinos elegidos por los locales. Punta Arenas, lo sigue siendo aún hoy, otro. La capital magallánica es casi una cita fija en el calendario competitivo de los nuestros.

Otros torneos, correspondientes ya al circuito de la Federación Regional de Golf del Sur, se convirtieron en un clásico para los riogalleguenses. El de Chapelco, uno de estos. Hace unos días, justamente en el club neuquino, se llevó a cabo el primer torneo oficial del año.

Una delegación integrada por cuatro jugadores del Río Gallegos Golf Club dijeron presente. Juan Carlos Mancini, Roberto Kwaszka, Mauricio Guaita y Jerónimo Lovino aprovecharon la falta de acción local, la Copa Challenger está en receso de verano todavía, para despuntar este sano vicio a unos cuantos kilómetros de distancia de nuestra capital provincial. Vaya que lo hicieron bien. Mancini, el mejor entre los de acá, hizo podio en su categoría. Kwaszka estuvo muy cerca de entrar al top tres en la suya. Lo de Guaita y Lovino, también fue para destacar, en un torneo que contó con muchos y excelentísimos jugadores. De lo mejor de la Patagonia para ser más preciso. Las principales posiciones en las categorías en las que participaron los riogalleguenses, quedaron así:  

Categoría 19-28.9

1º Sandro Malvarez 68 pts.

2º Alberto Hernández 64 pts.

3º Miguel Ángel Baraybar 61 pts.

4º Roberto Kwaszka 60 pts.

5º Roberto Williams 60 pts.

6º José Antonio Stadler 58 pts.

7º Hugo Sorzini 56 pts.

8º Diego Frisone 54 pts.

9º Federico Muñoz 54 pts.

10º Alejo Esteva 52 pts.

30º Jerónimo Lovino 41 pts.

Categoría 29-54

1º Jorge Rebagliati 63 pts.

2º Daniel Biaggio 62 pts.

3º Juan Carlos Mancini 57 pts.

4º Horacio Di Savino 55 pts.

5º Pablo De Mónaco 47 pts.

6º Mauricio Guaita 34 pts.

7º Miguel Claro 29 pts.

La competencia tuvo también otros ganadores. Los organizadores premiaron, tras la acción del último día, a quienes fueron los mejores en el juego por equipo. Los locales, con Edgardo Morrone, Enrique Paolucci, Jorge Rebagliati, Eduardo Vitello y Marcelo Elisei, se quedaron con el título complementario. Comahue GC (Javier Oller, Julieta Gamarra, María Laura Allende, Ivana Aubone y José Antonio Tesoniero) y Las Bardas (Daniel Andrada, Julio Araujo, Pedro Santos, Roberto Williams y Alberto Martínez) compartieron el podio con los anfitriones.

Más atrás, pero siempre dentro del top veinte, terminó el cuarteto que representó al Río Gallegos Golf Club.

El club de Chapelco fue testigo de todo. Dos grandes días se vivieron en esta pintoresca cancha. De las más lindas, tal vez, de la región. El clima acompañó y le dio el marco ideal a la competencia. La organización no se quedó atrás y estuvo a la altura. Los nuestros la pasaron bien. Y, como si fuera poco, compitieron a la par.

Mancini, Kwaszka, Guaita y Lovino ya pegaron la vuelta. Los cuatro se están preparando para encarar la parte final de la temporada doméstica. En breve.   

El dato

En esta oportunidad, la competencia no se disputó bajo la modalidad Medal. Más bien, los organizadores del certamen decidieron innovar un poco y optaron por el no tan menos popular sistema Stableford. Esta es una de las formas de juego más utilizadas a nivel mundial en las competencias de clubes. Y entre los golfistas aficionados. Suele ser bien recibida por parte de los propios protagonistas, ya que no solo tiene una mayor permisividad ante hoyos malos, sino que también propicia un ritmo de juego más rápido. Combinación que vuelve a la actividad más atractiva todavía para sus practicantes.

En esta modalidad de juego, cada hoyo puntúa con relación al par: 1 punto por el bogey, dos por el par, tres por el birdie y cuatro por el eagle. Cuando no se puede terminar el hoyo en los golpes que valen para puntuar, se recoge la bola. Gana quien suma más puntos.

Como la mayoría de los inventos o descubrimientos, esta modalidad de puntuación en el golf recibió el nombre de su creador. Del Frank Stableford hablamos. El inglés, cirujano de profesión, era una excelente golfista.

En 1907, Stableford ganó el campeonato de su club, el Royal Porthcawl. Su trabajo lo llevó a Wallasey y se unió al club de golf en 1914.

Stableford había experimentado con un sistema de puntuación alternativo cuando fue miembro, durante un corto período, de Glamorganshire en 1898. Tomó las puntuaciones de un torneo de bogeys, en aquel entonces la alternativa al medal era jugar contra el par, y usó un sistema de puntos para identificar un ganador. Lo cierto es que en aquel entonces el sistema resultó insatisfactorio y no se repitió.

Fue muchos años después, de nuevo en Wallasey, cuando ideó una fórmula que sí funcionó. Según él mismo relatava; “Estaba practicando a finales de 1931, cuando me pasó por la cabeza que muchos jugadores en las competiciones no se divertían porque después de jugar unos pocos hoyos, acababan rompiendo las tarjetas o abandonando el torneo. Me pregunté si se podría hacer algo al respecto”. El resultado de ese pensamiento fue el ahora conocido como sistema de puntuación Stableford.

En Wallasey, en 1932, se jugó el primer torneo bajo esta modalidad. Fue un éxito. A tal punto que otros clubes empezaron a competir con esta nueva manera de puntuar. El sistema Stableford llegó al profesionalismo. Torneos como The Internacional, en Colorado; el campeonato ANZ, el Investec Royal Swazi Open, el Royal Caribbean Classic y el Uniting Fore Care Classic fueron algunas de las competencias que se disputaron con el modo Stableford. En algunos casos, con modificaciones respecto de la idea original.  (Fuente: SotaPar)