Sesión ordinaria

Austeridad, arreglo de la terminal y críticas a Giubetich en el discurso de Grasso

El Intendente habló durante casi una hora en el inicio de las sesiones. Además de adelantar cómo será el presupuesto, reiteró el estado del Municipio que recibió, pero prefirió “mirar para adelante”. Aseguró que se reordenó el “desorden administrativo”.  

  • 06/03/2020 • 11:33
Grasso encabezó la sesión ordinaria.
Grasso encabezó la sesión ordinaria.

Ayer por la mañana, se realizó en el Concejo Deliberante el inicio de sesiones ordinarias para el periodo 2020. El acto estuvo encabezado por el intendente Pablo Grasso, quien dio el discurso de inicio y brindó un panorama en lo administrativo y económico en el que se encuentra la Comuna. En la sesión estuvo presente el gabinete completo de Grasso, como así también el cuerpo de los concejales de ambos bloques.

Como se esperaba, se trataron temas sensibles a la cuestión del Ejecutivo. Se hizo un repaso de cómo fueron los primeros tres meses de gestión y si bien se intentó no tenerlo como eje central del “speach”, hubo fuertes críticas al ex jefe comunal Roberto Giubetich y a su administración.

La primera parte del discurso no fue extensa y se trató de plantear el estado en el que Grasso recibió la administración comunal, aunque a lo largo del discurso fue retomando partes y anexándolas. "Recibimos una ciudad devastada, podría sentarme para hablar sobre cómo la recibimos, pero queremos contar el camino que queremos llevar adelante durante nuestra gestión", dijo Grasso en primer lugar. "Advertimos el desorden administrativo generalizado, provocado por pases indiscriminados, afectaciones y el gran desequilibrio a la afectación del personal, sin tener en cuenta la necesidad del Municipio. En tres meses reordenamos al recurso humano, poniendo en valor el compromiso de los empleados", resaltó en este marco.

"Hemos logrado reubicar agentes en cumplimento de funciones en otras instituciones", enfatizó.

Terminal

Uno de los temas candentes de la semana fue la puesta en marcha de un monto de $40 en la terminal de ómnibus, algo que fue explicado días atrás por la Secretaría de Gobierno. El Intendente aclaró sobre esto que era algo que ya estaba fijado y era cobrado por las agencias, aprovechando y recalcando que luego de la reunión con la gobernadora Alicia Kirchner se habló de inversiones y sobre "la primera inversión para remodelar la terminal de colectivos, que tanto espera la comunidad de Río Gallegos”.

En otro marco haciendo referencia a la cuestión tributaria, buscó diferenciarse de su par Roberto Giubetich, señalando que no se buscó aumentar los impuestos, sino que se optó por otro camino "manteniendo la palabra de lo que fue la campaña".

"Hemos analizado distintas decisiones administrativas, como bienes otorgados en comodato, licitaciones, arreglos de terrenos fiscales. Hay muchas, como venta de terrenos con destino de compra de equipamiento municipal que nunca llegaron efectivamente", lamentó Grasso.

En otro pasaje del discurso, el Intendente señaló que "en 2019 se comprometieron casi 50 millones de pesos en concepto de maquinaria, facilitando negocios a empresarios locales, lapidando el patrimonio. Hemos aumentado la recaudación propia en 48% comparado en 2019".

De todas formas, fue claro al precisar que están lejos de equilibrar el déficit, que es algo que llevará tiempo durante la gestión.

“Pronto elevaremos el presupuesto para el presente ejercicio, que será hermanado en una política de austeridad y saneamiento, expresando la real situación económica del Municipio. Esto es una deuda de 3000 millones con la Caja de Previsión Social y 1200 millones con la Caja de Servicios Sociales, situación histórica que solo se podrá corregir si se discute un nuevo esquema de coparticipación. Pediremos que se modifique la distribución primaria y pugnaremos por un mayor coeficiente en la distribución secundaria”.

También anunció que trabajará en conjunto con los legisladores por una nueva Ley de Coparticipación que permita actualizar los ingresos del Municipio, confiando en los datos que arroje el censo a realizarse durante este año. “Somos muchos más que 97.000 vecinos censados en el 2010 y el 29.8 es insuficiente”.

Promediando el discurso, Grasso destacó la puesta en funcionamiento del Natatorio, la recuperación de la flota municipal para el servicio de recolección, la descentralización de la Comuna a través del programa “Municipio Presente” y anunció la apertura de un centro de operaciones municipales en la calle 38 para captar las demandas y necesidades de los vecinos de los barrios de la zona oeste de la ciudad: Santa Cruz, San Benito, Bicentenario, Patagonia, 22 de Septiembre, Ayres Argentinos, entre otros.

Enumeró los programas realizados por el Municipio en estos tres meses como “Verano Seguro”, capacitaciones para los empleados y la planificación de instancias de formación para perfeccionarse y mejorarse en el desempeño de sus tareas. También las colonias de vacaciones donde pasaron 1800 chicos y las de Adultos Mayores, donde participaron casi un centenar de personas.

En otro tramo de su discurso destacó la puesta en funcionamiento del Natatorio, la recuperación de la flota municipal para el servicio de recolección, la descentralización de la Comuna a través del programa “Municipio Presente”, iniciativa de la Secretaría de Coordinación Ejecutiva que llevó a los barrios durante febrero y marzo todos los servicios de la Comuna.