Angustia e incertidumbre: los varados y quienes los esperan deben aguardar hasta el 10 de mayo

El Gobierno suspendió las repatriaciones por vía terrestre y aérea hasta el 10 de mayo, con el objeto de aguardar cómo evolucionan las mil personas que fueron traídas en este último tiempo.

El lunes en colectivo llegó un contingente más a Caleta Olivia y será el último.

Cientos de santacruceños quedaron afuera por lo menos 35 días, ya sea por motivos laborales, vacaciones o salud, están diseminados en varios puntos del país pero también otros países.

Todos tienen un problema en común pero diversas realidades.

El varado

En Córdoba por ejemplo, hay tres colectivos que están “listos para partir”, según contó a TiempoSur, Gastón Rivas, uno de los cientos de personas varadas.

Rivas ya había adelantado a este medio semanas atrás, la lista de espera para volver, pero ahora es diferente: La espera será como mínimo por dos semanas.

“Estamos a la espera de que la empresa consiga los permisos y salga lo antes posible”, dijo y aclaró que conoce la restricción que resolvió el Gobierno.

“Sabemos que estamos en stand by, pero igual esperamos poder salir y no todos juntos, sino de forma escalonada”, precisó.

Desde Córdoba, provincia a la que Rivas viajó para visitar familiares, trató de realizar gestiones para que el Gobierno nacional habilite al área de transporte de Córdoba a realizar vuelos hasta Río Gallegos, aunque “fue imposible”.

Por lo menos son 250 personas. Rivas reside en una vivienda familiar y solo se hace cargo de sus gastos diarios, pero en muchos casos -señaló- subsisten en hoteles. “Hay gente que no tiene el dinero para seguir aguantando mucho más”.

Pero no todos están a la deriva. Aclaró que algunos pudieron ser asistidos por Casa de Santa Cruz, pero el problema es que “no dan abasto” por la cantidad de gente que está esperando volver.

Se añade que un grupo de varados por su estado de salud deben retornar sí o sí por avión.

“Estamos dispuestos a que se haga un protocolo más exigente y estamos concientizados de que debemos hacer la cuarentena una vez que retornemos y que nadie puede salir de su casa. La gente hasta está dispuesta a hacerse el hisopado”, contó.

Rivas también remarcó que “no hay que demonizar a quien viene de afuera”, ya que no es culpa de la persona contraer el virus, pero sí se la puede cuestionar si no realiza la cuarentena de 14 días en su vivienda al retornar.

“Es una enfermedad, no somos delincuentes. El Estado debería fortalecer los controles”, mencionó y agregó que existe “angustia generalizada e incertidumbre”.

El que espera al varado

Cada varado utiliza la red social para expresar su caso en particular. 

Un caso representativo es el de María de Los Ángeles Lauk, quien espera el retorno de su hijo Francisco Aguolar, que estudia Ingeniera Aeronáutica en Córdoba.

La mujer realizó una campaña virtual por la red social Facebook para que puedan retornar todos los estudiantes.

“Él (Francisco) se fue en febrero porque debía rendir un final y se quedaba a empezar el año. Cuando se veía que esto venía, a mediados de marzo, intenté que viaje a Buenos Aires para que esté con mi mamá y pase allí la cuarentena pero en esos días se terminaron los pasajes”, contó a TiempoSur.

Luego intentó que su hermana viajara por tierra para buscar a Francisco pero “se cerraron los caminos”.

Su hijo cuenta con la obra social provincial, pero ante las irregularidades en sus prestaciones, también lo anotó en una prepaga.

“Mi angustia es que si le llegara a pasar algo, cómo hacemos para ir para allá”, advirtió.

El 2 de mayo debería partir el vuelo de Francisco, pero fue suspendido. “Todo está a la espera de la autorización de Nación y Provincia”, recordó.