ILE garantizado, pero por médicos generalistas

Ayer el diario Clarín recordó  que se cumplieron siete años desde que la Corte Suprema dictó un fallo histórico que repitió que el aborto no punible es un derecho de las mujeres, y que por lo tanto, no era necesario judicializar estos requerimientos y exhortó a todas las provincias a adoptar medidas para garantizar el acceso al aborto legal. El Ministerio de Salud de la Nación publicó entonces un Protocolo de Atención. Santa Cruz adhirió ese mismo año al protocolo.

El tema surgió en la provincia luego de que integrantes de FESPROSA consultaran a autoridades de Salud si se garantiza la ILE en los hospitales de Santa Cruz.

La respuesta fue la misma que este medio señaló en marzo del año pasado: Los ginecólogos de los nosocomios más importantes de la provincia, Río Gallegos y Caleta Olivia, son todos objetores de conciencia.

Sin embargo, según pudo averiguar TiempoSur, la intervención a mujeres aptas para la ILE se realiza en Río Gallegos, y por lo menos una mujer por semana acude a los centros de Salud y Hospital para solicitarlo.

El procedimiento está a cargo de médicos generalistas que administran misoprostol pero con el límite de que no supere la 12 semanas de gestación (el proyecto de aborto legal que no fue aprobado el año pasado alcanzaba la semana 14 de gestación), aunque previamente se le realiza una entrevista. 

Pero en el proceso, no todas finalmente interrumpen el embarazo. 

De no acceder al ILE, las mujeres acudirían a abortos de manera ilegal que pondría en peligro sus vidas.   

Los médicos generalistas realizan la atención en el domicilio, y si es necesario le realizan una ecografía, y se le entrega las pastillas ya que en muchos casos las mujeres no cuentan con obra social.

En cuanto a la edad, es variado, pero principalmente son mujeres de 19 a 25 años, aunque también existe un porcentaje  de mayores de 30 años (que son casos de  violencia de género). 

Los pacientes del interior provincial, de localidades cercanas a Río Gallegos, deben acudir a la capital de Santa Cruz. (A veces se resuelve en la misma ciudad, como ocurrió con un caso de El Calafate).

En Caleta Olivia la situación es más complicada. Las mujeres en muchos casos deben migrar a Comodoro Rivadavia para  acceder a la ILE.

Un caso testigo fue el que publicó este medio el año pasado, cuando una joven   víctima de violencia de género solicitó la intervención al Hospital de Caleta Olivia, pero como todos los ginecólogos eran objetores de conciencia, nadie se lo realizó. Debió esperar 30 días.

El 20 de noviembre del año pasado, los abogados del grupo antiabortista Pro Vida presentaron en Río Gallegos ante la ANMAT un pedido para que se suspenda la venta en farmacias de Misoprostol.