Fiscal pidió cadena perpetua para el imputado por el homicidio de Jaimes

En la mañana de ayer, y ante un gran operativo de seguridad, se dio inicio al debate oral y público que tiene como único imputado a Walter Julián Ramos, de 22 años, quien era pareja de la víctima Antonella Jaimes, de 20.

Minutos antes de iniciar el debate en la puerta del recinto se congregaron integrantes de la agrupación feminista “Las Rojas” y el Plenario de Trabajadoras para acompañar a los allegados y reclamando que el caso siente un precedente en la provincia, ya que piden que la carátula sea femicidio.

Mientras se esperaba el ingreso al recinto se  produjo un pequeño altercado entre las familias, en el momento en que llegó el imputado, en donde debió intervenir el personal del Cuerpo de Infantería quienes calmaron los ánimos.   

Mientras tanto, el Dr. Joaquín Cabral dialogó con las partes en la causa para solicitarle que eviten cualquier enfrentamiento tanto fuera como dentro del recinto. 

Pasadas las 09:30 de ayer, se reunió el Tribunal Oral, que se encuentra integrado por las Dras. Rosa Núñez y María Alejandra Vila, bajo la presidencia del Dr. Joaquín Cabral, son partes en el debate, el fiscal de Cámara, Dr. Gabriel Giordano, el imputado Walter Fabián Ramos y su defensor de Cámara, Dr. Santiago Lozada, quien se encuentra asistido además por la letra adjunta de Cámara, Dra. Berta Vivar.

Luego de realizadas las presentaciones, el Presidente le cedió la palabra a la Secretaria, quien pasó a informar las novedades al Tribunal, ya que dos de los testigos no fueron encontrados y estaban siendo buscados. Además de comentarles que había elementos para exhibir durante el debate.

Posteriormente Cabral se dirigió a los presentes para que mantuvieran el orden y en silencio, y se evitaran los disturbios ya que podría desalojar la sala y si los disturbios seguían en la parte externa del recinto se suspendería el juicio hasta nuevo aviso.

Luego se le preguntó al imputado el nombre y apellido y contestó ser Walter Fabián Ramos, de 22 años, desocupado, oriundo de Río Gallegos y no contaría con antecedentes penales.

Elevación a juicio                                                                                                                                                                                           

Más adelante se leyó por Secretaría la elevación a juicio, en la cual se describe los hechos y manifiesta que queda acreditada la materialidad, autoría, como así también la responsabilidad del encartado en el mismo.

Según consta en el expediente, “El 25 de enero del 2015, siendo las 21:45, el imputado estaba en la vivienda ubicada en La Paz 724 junto a su pareja Antonella Jaimes, a quien agredió con un arma blanca ocasionándole una herida punzocortante en la mama izquierda, siendo asistida por los médicos del Hospital Regional, entrando en paro cardiorespiratorio en cirugía, produciéndose el óbito a las 22:35 del mismo día, causado por un shock hipovolémico por herida con arma blanca en el miocardio”. Seguidamente la secretaria informa de los testimonios que dieron los testigos durante la instrucción, además de las pericias psicológicas que le realizaron al imputado. Y se manifiesta que el Fiscal de Instrucción calificó legalmente la causa como homicidio agravado.

Cuestiones previas

Continuando con el debate, el Presidente le cedió la palabra al Fiscal, quien solicitó agregar un testigo más para prestar declaración testimonial, ya que es una amiga de la víctima y puede hablar sobre la convivencia y la violencia que había en la pareja; por otra parte aclaró que la mujer no fue citada durante la instrucción.

Ante este pedido el Defensor Oficial se negó a esta solicitud, ya que no se conoce el contenido de los dichos y no serían relevantes a la causa.

Por este motivo el Dr. Giordano explicó que si no se la llamaba a declarar no importaba, ya que lo harían varios familiares de la víctima, por lo que se podría saber cómo era la relación de pareja.

Luego de deliberar el Tribunal manifestó que de acuerdo a cómo se vaya realizando el juicio se verá si se llama a declarar o no a la testigo propuesta por el Fiscal, por lo que se entiende que el Tribunal difirió la incorporación de este testigo. 

Lectura de derechos

Posteriormente el Presidente del Tribunal le cede nuevamente la palabra a la secretaria, quien le lee los derechos al imputado y luego se le consulta si va a prestar declaración, y éste se niega, por lo que se procede a la lectura de la declaración indagatoria brindada durante la Instrucción por secretaría. 

Según manifiesta el expediente, “el domingo a las 21:00 busco en su trabajo a Antonella, en la panadería de calle Rivadavia, cuando llegué estacioné en la dársena de la panadería y llegué justo en punto, siempre nos mensajeábamos o llamábamos. Ese día me llamó para decirme que estaba lista para irse, yo le di el volante y ella siguió manejando, nos fuimos para mi casa. Siempre evitamos una zona porque hay un grupo con el que tenemos problemas; cuando llegamos a la calle Ayohuma y Liniers es cuando vimos a F.P.

-apodado “Pichi”- en una casa de chapa, F.P. se agacha y busca unas piedras y las arroja al auto, una de ellas le pegó a la puerta del acompañante. Mi novia se bajó y le pegó dos piñas al mencionado, que estaba como drogado, veo que le tira un manotazo a mi novia pero Antonella lo esquiva. Yo vi que tenía algo en sus manos pero no alcancé a ver bien lo que era, era algo oscuro; negro, ellos estaban como a cinco metros del auto. Yo no pude bajar porque la puerta del acompañante estaba trabada por un choque anterior, cuando me bajé el `chabón´ F.P. salió corriendo, éste le pego un puntazo a mi novia. Ella se subió al auto y me dijo que no pasaba nada y nos fuimos a mi casa, ella no me dijo nada, no se había dado cuenta que tenía un corte. Cuando llegamos a mi casa voy a cerrar la puerta de la pieza para que no entre nadie y ella se coloca detrás mío, ese día íbamos a comer con mi papá y luego a tomar mates con su mamá. Después de cinco minutos de estar en mi casa ella me abrazó y me dijo que me amaba y comenzó a desmayarse, y veo que tenía una mancha de sangre. Le dije a mi papá para que llame a la ambulancia, pero el que llamo fue mi tío. El primero en llegar fue el personal policial y luego al rato llegó la ambulancia. A Antonella la subimos al sillón y le pusimos un trapo para que no sangre y le meto los dedos en la boca para que no se trague la lengua. El personal policial comienza a querer reanimarla, luego llegaron los médicos y se la llevan.

Ante las preguntas que le realizó la Jueza de Instrucción, Ramos fue respondiendo, “con Antonella estuve cuatro años de novio siempre andábamos juntos, la tenía que llevar y buscar a todos lados porque lo guachos que mataron a su hermano siempre nos molestaban, nos tiraban piedras e inclusive nos han chocado”.

Ampliación

Una vez finalizada la lectura se procedió a leer la ampliación de la declaración indagatoria realizada el 6 de febrero del 2016 ante la Jueza de Instrucción, en la cual Ramos manifestó: “Ese día a las 20:00 voy a buscar a la mamá de Antonella y después fui a visitar a un amigo, como a las 20:50. En eso me llama Antonella para que la busque y luego me manda un mensaje de texto que me apure porque ya estaba cerrando el local. Llegue a las 21:00, estaba cerca, estaciono y me dice dame el volante porque vos manejas despacio. Toma por las calles Ramón y Cajal, Cochabamba y Hernán Cortes, pero como venía tuvo que doblar porque La Paz es contramano; dobló por Ayohuma hasta Liniers, y vimos que en la esquina estaba F.P., agarra las piedras y las tira al auto, le pega del lado del acompañante donde tiene un choque, para Antonella y se baja, le pega dos piñas y el chabón saca algo, le tira un puntazo que Antonella esquiva, en ese momento me bajo y el chabón sale corriendo y se mete en su casa, de donde salieron tres pibes con mas piedras y palos, y los hermanitos. Los identifico a J.U. y F.V., quienes días antes me habían arrojado piedras al vehículo, realizando la denuncia en la comisaría Cuarta, y F.P. me amenazaba con el cuchillo.

Mi novia se sube al auto y lo deja estacionado en el taller y me va a buscar, yo estaba por la Liniers, le dije que no se baje más así y que no haga eso. Subimos al auto y me dice que vayamos a tomar mates a la casa de su mamá y que no le comente nada de lo que había pasado. Antes de ir a su casa le dije que se estacione que tenía que buscar mis cosas; bajé rápido y agarré la balanza, el fierro y la marihuana; el plato, todo lo meto en una bolsa, cierro la puerta y escucho la alarma del auto, siento que salía mi papá, yo iba saliendo cuando me asusta porque se me aparece en el pasillo. Yo seguía lagrimeando y se burla de mí, me dice que era un maricón y se reía, cuando llegamos a la puerta me abraza y me dice que me amaba, me da la llave del auto y me dice tomá manejá vos maricón, llorón. Estábamos en la puerta cuando se me empieza a desmayar, me abraza y me dice que estaba mareada y se cae y se golpea con la puerta que queda abierta por completa. Ella tenía su mano en su teta izquierda y tenía como mojado, ahí arrancó su delantal y veo que tenía un corte y le digo pero cómo no me dijiste nada y me dice que es solo un corte y que no sea maricón, le digo a mi papá que me ayude y fue a buscarlo a mi tío que vive atrás y vuelve, entre los dos tratamos de subirla al sillón pero quedó la mitad del cuerpo en el suelo. Mi tío llamó a la ambulancia pero le dijeron que primero tenía que ir la policía para corroborar el problema. Mi tío llamó a la policía que llegó en minutos, después los policías me ayudaron a subirla a Anto al sillón, vemos que tenía el corte. Ella seguía diciéndome que no era nada, que no llore, yo ya sentía sus labios fríos y se le cerraban los ojos, y comenzó a como a convulsionar. La policía le tiró la cabeza hacia atrás y comenzó a hacerle masajes en el pecho, la ambulancia llegó como 10 minutos más tarde, la sube y la llevan al hospital. En ese lapso me llama mi cuñada preguntándome qué había pasado. Yo le digo que no era nada que Anto se había golpeado, que no era nada y que se fuera a fijar ella porque a mí me iban a llevar preso. En eso llega la sobrina y comienza a patear el móvil diciendo siempre lo mismo con ustedes, cuida violines, nunca hacen nada. Me llevan a la comisaría me sacan toda la ropa, me meten en una celda y después me llevan a una oficina. Entran policías -creo que eran de la Brigada- yo les decía por qué no van a buscar a F.P. Ellos entraban y salían de la oficina, cuando me llevan la ropa me visto y me llevan a la Quinta. Dos días después me llevan al Juzgado y ahí me entero que Antonella había fallecido el mismo día y que no llegó a la operación.

Dos días antes cuando bajamos en mi casa, como a las 13:00 aproximadamente, entramos por la puerta del patio cuando siento un ruido y veo a un Corsa azul y a J.G. que estaba del lado del acompañante con un arma en la mano amenazando y se van.            

Testigos

Posteriormente comenzaron a desfilar los testigos de la causa, primero lo hizo el médico de la guardia del nosocomio local, que la asistió en un primer momento; el chofer de la ambulancia, y luego se escuchó la declaración de la médico forense que le realizó la autopsia al cuerpo de Jaimes, y por determinación del Tribunal se pasó a un cuarto intermedio de diez minutos.

Al regreso del corto receso le tocó el turno a la madre de la víctima, quien pidió que al momento de declarar el imputado se retirara del recinto ya que ella no podía verlo, ni hablar ante él.

De consulta realizada al Fiscal de la causa, éste no se opuso al petitorio ya que la mujer, mientras que el Defensor Oficial sí se opuso.

Luego de deliberar el Tribunal solicitó que el imputado sea llevado a una oficina contigua donde podría escuchar los dichos de la madre. Luego hizo lo propio la hermana de la víctima, quien también brindó su declaración

–pero esta vez sí ante el imputado-, y manifestó que él le pegaba.   

Por último se escuchó el testimonio de una de las amigas de Antonella Jaimes, quien contó que en varias oportunidades la había visto con marcas de golpes. Siendo ya las 13:00, se pasó a un cuarto intermedio hasta las 15:30, hora en que se escucharon los testimonios de los peritos y se dieron inicio a los alegatos.

Cadena perpetua

El Dr. Gabriel Giordano brindó sus alegatos y solicitó que la carátula de la causa sea homicidio agravado por la relación de pareja y de femicidio, los que se basó en el artículo Nº 80 en el inciso Nº 1 y el Nº 11.

Una vez que finalizó le tocó el turno al Dr. Santiago Lozada, quien luego de fundamentar su parecer, solicitó la absolución de su pupilo.

Por último el Tribunal le preguntó a Ramos si quería decir algunas palabras y éste se negó a hacerlo, por lo que se pasó a un cuarto intermedio hasta el martes 15, fecha que se conocerá la sentencia.