Producción ovina

Tienen identificados ocho focos de sarna a lo largo de Santa Cruz

Se encuentran circunscriptos en la meseta central de la provincia, en la zona conocida como Tucu Tucu. La semana pasada, en una nueva reunión de la CoProSA, el SENASA, el CAP, la FIAS y la Sociedad Rural de Río Gallegos, analizaron el cuadro de situación y los productos para combatir esta enfermedad.

  • 22/10/2019 • 10:40
El brote de sarna comenzó a verse nuevamente en los últimos años. (Archivo).
El brote de sarna comenzó a verse nuevamente en los últimos años. (Archivo).

El Tucu Tucu se encuentra sobre la zona pre-cordillerana, entre el norte del Parque Nacional Perito Moreno y el sur del sector productivo conocido como “San Martín”. En ese sector, hay al menos cinco emprendimientos productivos.

Esa zona es una de las más afectadas –en los últimos años- por un brote de sarna ovina, lo cual ha llevado a las autoridades a poner el acento en la prevención, materia en la que los productores cuentan con algunas herramientas que se les brinda desde el SENASA y el CAP (Consejo Agrario Provincial).

El cuadro de situación- La semana pasada se realizó un nuevo encuentro de la CoProSA (Comisión Provincial de Sanidad Animal), donde además del CAP, que es el ente que coordina la comisión, participan el SENASA, la FIAS (Federación de Instituciones Agrarias de Santa Cruz), la Sociedad Rural de Río Gallegos y el INTA.

Allí, se analizan los problemas sanitarios de toda la provincia. “La verdad que es ámbito interesante de discusión, de conocimiento, de ver qué pasa en otras zonas, por ejemplo, charlamos sobre cómo se habían evaluado los resultados que tienen ciertos productos veterinarios para el control de enfermedades como la sarna, el melofago, el piojo”, indicó la presidente de la Rural local, Liliana Fernández.

Manifestó que se habló, entre otras cosas, de las pruebas que hizo el SENASA en el campo experimental que se llama “Las Plumas”, donde se evalúa la eficacia de los productos antes de aprobarlos, cuáles son los requisitos, etc.

La dirigente rural indicó que hay una zona en Santa Cruz conocida como el “Tucu Tucu”, donde hay un foco de sarna de una antigüedad considerable de por lo menos 20 años, que ha tenido diferentes etapas. “Se ha ido trabajando en distintas oportunidades; en el 2008 se erradicó totalmente, la verdad que hubo cero focos de sarna, con un trabajo conjunto entre el Consejo Agrario, el SENASA y los productores de la zona”.

En el mismo sentido, enfatizó que hubo un período de calma, pero “lamentablemente hoy hay ocho focos” lo cual obliga a “coordinar las actividades entre todos” para luchar contra este flagelo del campo santacruceño. “La gente del SENASA la verdad que en algún momento no tuvo los fondos para avanzar en el programa, entonces por ahí se descuidó; el CAP también aportó en su momento”, pero lo más importante “es el compromiso de los productores porque es el primero que se perjudica”.

Al respecto, expuso: “En nuestra zona, cuando hubo focos de sarna, la verdad que nuestros productores trabajaron bien. El SENASA ejerció mucho control, se trabajó seriamente y la verdad que creemos que es importante para la región declararse libre de todas las enfermedades”, lo cual “posibilita dejar de aplicar productos que son caros y trabajo que quizás en un futuro podés eliminar porque también es costoso”, dijo.

Cómo se combate- Según explicó Liliana Fernández, un producto que se utiliza frecuentemente entre los productores para combatir la sarna es la ivermectina. “Había muchos comentarios que no estaba siendo tan eficaz. En realidad, se estaba aplicando en forma de inyectable, algunos hacían un baño por aspersión y la otra opción es el baño por inmersión”, sostuvo.

En la CoProSA “la persona que vino del SENASA explicó las pruebas que habían hecho ellos y la realidad es que hay cepas más resistentes y menos resistentes; no es que la ivermectina no funciona, sino que en realidad depende la cepa de sarna que se trate”, indicó y añadió que, en una de las cepas más virulentas, “fue necesario hacer un baño de inmersión y después un inyectable”.