Realizan talleres de oficios para jóvenes entre los 16 y 18 años

En el marco del Programa Nacional “Quiero Ser”, el Centro de Promoción de Derechos de la ciudad de Río Gallegos se encuentra organizando una serie de talleres de oficios destinados a jóvenes entre 16 y 18 años que se encuentren transitando el secundario o que ya lo hayan finalizado.

Los talleres tienen como eje principal, entre otras cosas, brindar a los jóvenes una herramienta para facilitar su inserción en el mercado laboral a través de la experiencia en los diferentes oficios.

Julia Chalub, secretaria del área de Niñez, Adolescencia y Familia de la Municipalidad de Río Gallegos, dialogó con TiempoSur acerca de los talleres y el beneficio de aprender un oficio: “El 6 de junio empiezan los talleres de oficios del programa “Quiero Ser”, que es un programa financiado con fondos de la Secretaría de Niñez de la Nación. Presentamos un proyecto que permite financiar estos talleres de oficios destinados a adolescentes de 16 a 18 años y que incluye barbería, panificados, peluquería, reparación de celulares, electricidad, costura, carpintería, y pedicuría y manicuría”, explicó.

Una herramienta para el futuro

Al ser consultada por este medio acerca de cómo surge la idea de realizar un taller de oficio destinado a los jóvenes, Chalub expresó que “surge de una demanda de ellos. Cuando empezamos con los talleres el año pasado después de la pandemia, surgió la necesidad de que muchos chicos y chicas querían empezar a hacer actividades, y bueno, también fuimos viendo cuáles eran las propuestas que más les interesaban para armar este proyecto, entendiendo que los chicos entre 16 y 18 años pueden adquirir un oficio y, por qué no, pensar en el futuro y desarrollarlo formalmente”, agregó.

“Estos talleres son re interesantes, porque aprenden el oficio y también se trabajan transversalmente los derechos y el cierre de los talleres con la elaboración de su currículum, en cómo promocionar a través de redes sociales sus servicios, por eso busca también que los jóvenes tengan una oportunidad cuando terminen la escuela, que eso también es un requisito: para asistir a los talleres también hay que asistir a la escuela. Siempre fomentamos el derecho a la educación y que también es obligatorio”, remarcó la Secretaria.

Un futuro incierto

Una de las principales problemáticas entre los jóvenes que se encuentran transitando la educación secundaria es lo dificultoso que se torna el finalizar sus estudios, lo cual puede significar, a futuro, un obstáculo para ingresar al mercado laboral: “Hay algo que no podemos desconocer y es que hay muchos chicos a quienes les cuesta terminar la secundaria. De hecho, hay muchos que no la terminan. Por eso, es importante fomentar de que participen de un oficio o que hagan algo que les gusta y que también puedan terminar la escuela. Y, aquellos que terminan la escuela, también se enfrentan a un mercado laboral que es exigente, que exige experiencia, y esto puede ser para ellos también una habilidad que les permita insertarse laboralmente, porque la idea también es que ellos puedan conocer cómo se desarrolla el oficio en la comunidad, porque para eso tenemos previstas visitas a distintos lugares donde se desarrolla el oficio, para que sepan cómo es el trabajo desde adentro. Es una herramienta para ellos el haber tenido la herramienta de formarse, de aprender a desarrollar el oficio y después de poder armar su currículum, lo que los pone en mejor posición que aquellos que no han pasado por esta experiencia”, puntualizó Chalub.

Una de las razones que dificultó a los jóvenes transitar e inclusive finalizar los estudios secundarios fue el comienzo de la pandemia y la implementación de la virtualidad como modalidad de cursado: “Con el tema de la pandemia hubo muchas dificultades por el tema de la conectividad, por un lado, después la enseñanza se da siempre con otro y estar en soledad no es fácil. Los chicos necesitan mucho acompañamiento y lo necesitaron estos dos años, y fue muy difícil por la pandemia”, concluyó Julia.