Proyecto en el Congreso

Primera marcha en contra del aborto legal: “La mayoría está en contra, es indudable”

Será el 28 de noviembre a las 15:00 en todo el país, organizada por la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina. En Río Gallegos habrá una caravana. Los argumentos de un Pastor en contra de la adopción de un niño por parte de un matrimonio del mimo sexo, ante la posibilidad de que la madre aborte.

  • 22/11/2020 • 12:42
Pastor Segundo Gamín
Pastor Segundo Gamín

“Hoy se presentó un nuevo proyecto de ley para legalizar el aborto en Argentina. Consideramos que esta ley es inoportuna, busca ser tratada apresuradamente en un Congreso que no ha cambiado su conformación desde 2018. Y, en ese tiempo ya dijo que no”, escribió en su cuenta de Twitter el pasado 17 de noviembre Osvaldo Carnival, Relaciones Externas de Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (ACIERA).

“Tampoco contempla el real federalismo del país porque en más del 80% de las provincias se identifican con la defensa de las “Dos vidas”.

¿Por qué no escuchan a la mayoría?

¿Por qué ahora? ¿Por qué a las apuradas?

Es tiempo de unir y proteger la vida”, agregó en otro tuit el referente de las iglesias cristianas evangélicas de todo el país que el próximo 28 de noviembre a las 15:00 realizarán una movilización en contra del proyecto de aborto legal que envió el Ejecutivo nacional, luego de dos años que hubiera sido tratado en el Congreso, y que tuvo la aprobación de la cámara baja pero no del Senado.

La puja por el proyecto que divide al país tendrá una nueva puja entre los denominados “Pro Vida” y los pañuelos verdes, que también se replicará en Santa Cruz y Río Gallegos.

La movilización “será con todos los protocolos”, aseguró el Pastor Segundo Gamín, del Consejo Pastoral de Río Gallegos y Pastor de la Iglesia Bethel que comenzará en Almirante Brown, recorrerá la autovía, Avda. Kirchner y pasará por fuera de Casa de Gobierno.

“Van a participar católicos, como sucedió con la movilización contra el abuso infantil. Éste no es un tema religioso, va más allá de las ceremonias aunque es la base bíblica que ambos defendemos”, afirmó el Pastor a TiempoSur.

Gamín opinó que este proyecto es “importante”, por lo que no debería ser tratado “en medio de una pandemia cuando la gente está luchando entre la vida y la muerte y por eso el aborto está muy fuera de foco”.

“Hoy más que nunca las políticas deben aprender a ubicarse en los tiempos, sobre todo porque es una mayoría contra una minoría, con tantas iglesias cristianas evangélicas y católicas a favor de la vida”, resaltó.

El Pastor consideró que solo una minoría está a favor de la legalización del aborto. A modo de ejemplo, contó que una de las iglesias realizó una encuesta en barrios de Río Gallegos, en donde de 450 mujeres, el 80% está en contra de la ley que envió el Presidente al Congreso.

“Fue una encuesta de gente común que realizó la iglesia Bautista y fueron mujeres de los barrios, ciudadanos”, añadió.

 

TS: ¿Se reunirían con los diputados y senadores de Santa Cruz para conocer sus posturas?

Pastor: Si, por supuesto. Estamos abiertos a hablar de esta situación porque hay otras alternativas. Es prioridad tocar este tema pero no es este el momento y debemos hablar con la gente que tiene voto y que debe hacerse responsable.

 

-¿Qué le diría a los legisladores?

Que escuchen al pueblo argentino y no a un grupo minoritario con cierta ideología. El pueblo, la familia, es la base de la sociedad y si hacen una encuesta al vecino… Porque deberían salir a preguntarle si están de acuerdo.

 

-Entiende que la mayoría está en contra del aborto legal

Sí, la mayoría, es indudable. Nuestra argentina está edificada sobre la base de la familia más allá de la inclinación religiosa. En la base familiar, tradicional en donde un bebé no se rechaza. El obrero, clase media y el más pobre, siempre luchó por su hijo y poder crecer de la mejor manera.

 

-La composición de familia tradicional hace muchos años.

Sí, pero sigue la base cristiana. Hay ideologías que golpean a la familia, pero la familia continúa, incluso la gente se sigue casando y formando una familia para tener hijos y eso uno no lo puede borrar.

 

-Preferiría que no existan abortos, pero ante esta posibilidad prefieren que la madre lo dé en adopción, pero ¿aceptaría que lo adopte un matrimonio del mismo sexo?

Hay muchos puntos de vista. Generalmente si vamos a la realidad hay una gran cantidad de padres esperando por la adopción de un niño durante muchos años. Muchos matrimonios desean tener un bebé y quieren adoptar, pero pasan los años y no se lo dan. Cuando otra ideología toma un niño, es como si fuera la única opción, pero hay muchos padres y madres esperando un bebé y le ponen quinientas mil trabas.

 

-Entonces es una opción que lo adopte un matrimonio del mismo sexo.

No, uno no lo acepta porque hay funciones y tomamos a aquellos que identifican a una familia. Hay matrimonios que esperan por años y no se los dan.

 

-No identifica como una familia a dos mujeres o dos hombres que quieren adoptar.

No, es antibíblico y va en contra de los principios de Dios que creó al hombre y a la mujer.

 

-¿Y si esa adopción fuera la mejor opción para que no aborte la madre?

Antes de llegar a ese punto hay otras opciones, como incluso la propia familia de las madres, como los abuelos que quieren hacerse responsables. Pero esto no es en contra de ellos, uno no rechaza sus inclinaciones sexuales, pero tampoco se puede dar como una realidad de que es lo correcto. Cada persona toma su decisión, pero en cuanto a una fase cristiana, es hombre o mujer, no hay opciones.

 

Abrir las Iglesias

Por otra parte, el Pastor volvió a reclamar la apertura de las iglesias evangélicas, que disponen de un protocolo propio debido a que su celebración es diferente a la católica.

“Han habilitado los bares, los pubs pero no las iglesias. El Gobierno está mirando la economía, pero sin mirar lo que hace la pandemia porque en un bar hay 50 personas sin cuidado ni barbijos y nosotros tenemos un protocolo exigente en el cual no nos saludamos, entramos a orar por menos de una hora y nos vamos. Es mucho más seguro”, advirtió.

Según Gamín, el Gobierno les dijo que era “peligroso” e “imposible” por ahora abrir las iglesias, aunque solicitan solo habilitar un 30% de los salones.