Puerto Deseado

Polémica por practicar la eutanasia en un perro que tenía familia

Desde hace dos meses, una mujer y su familia de Puerto Deseado, buscan a su perro “Farru”, el cual el 27 de junio fue capturado por el personal de Control Canino. Entre idas y vueltas, el 24 de agosto de la mujer, que ya había contratado un abogado fue informada que en su perro se habría practicado la eutanasia.  Ahora pide justicia por Farru y destitución de la Directora de Control Canino.

  • 28/08/2022 • 19:48
Justicia por Farru.
Justicia por Farru.

En Puerto Deseado, una familia denunció que en Control Canino de esa ciudad habían practicado la eutanasia con su perrito “Farru”.

Luego de idas y vueltas, la mujer contrató a un abogado para que la ayudara a recuperar al perro, pera ya era demasiado tarde, Farru había sido sacrificado en lugar de darlo en adosción.

 

En un extenso texto la dueña de Farru cuenta todo lo que tuvo que pasar hasta que se enteró que su can había sido sacrificado.  

El relato inicia: “Hace 3 años, adoptamos un perrito callejero, lo nombramos Farru, lo hicimos parte de nuestra familia, nos encargamos de sus cuidados llevándolo al veterinario y teniendo todas sus vacunas al día, cocinándole y durmiendo con nosotros en la cama, creciendo a la par de mis hijos.

El 27 de junio de este año, agentes de control canino se llevan a Farru de nuestra casa en calle Rivadavia. Mi familia me avisa inmediatamente y logro llegar a las oficinas de control canino al mismo tiempo que la camioneta que llevaba a nuestro perro. Me presento y les digo que soy la dueña y que pago lo que corresponda para llevármelo. Allí me comunican que estaba chipeado a nombre de otras personas y solo ellos podrían retirarlo; y agregan que de todas formas tendría que esperar porque habría denuncias realizadas en contra del perro y tenían que evaluar su comportamiento. Lo que me pareció raro porque nunca recibimos quejas sobre Farru, y el mismo vivía adentro, solo salía a hacer sus necesidades.

Ante la negativa les mostré fotos de Farru con nuestros hijos pequeños, con niños del barrio y hasta con nuestro gato y otro perro más pequeño con el que convivían en armonía y hasta dormían juntos. De ninguna manera nuestro perro podía ser tildado de agresivo.

 
 

En el tiempo que lo tuvieron en las jaulas de control canino fuimos a verlo casi todos los días, lo veíamos triste y sin ánimos, no quería comer el alimento que le daban por que estaba acostumbrado a que le cocinemos, el chico que los cuidaba nos decía que se portaba muy bien y que no era agresivo con los otros perros. Todos los días pregunte por su situación, me decían que estaban esperando a que la persona que en el chip era responsable del perro baje de la mina para preguntarle si lo quería dar en adopción. También constate en el juzgado de faltas que no habían denuncias ni multas por Farru.

Entre idas y vueltas, el día 23 de agosto voy a ver a Farru, como lo hacía cada vez que podía y la Directora de Control Canino me comunica que “la dueña” del perro se lo había llevado. Busque a esta señora y para mi sorpresa me dice que agentes de Control Canino hablaron con ella y le hicieron firmar un papel para que el perro volviera a estar en adopción.

Ese mismo día volví a buscarlo a control canino y me dijeron que ya lo habían dado adopción, una burla!!. Ante tantos impedimentos busqué asesoramiento legal para que me ayuden con la adopción y el cambio de titularidad de Farru, asegurando que estamos dispuestos a pagar multas, estadía y todo lo que hiciera falta para que nuestro perro vuelva a casa.

 

La asesora acuerda una reunión con Directora de Control Canino para el día 24 de agosto por la mañana. En dicha reunión la Directora de Control Canino le dice que Farru fue sometido a eutanasia ya que “los dueños” firmaron un papel autorizando a que se le ponga fin a la vida de Farru. Noticia que nos destroza, al punto que uno de nuestros hijos aun continua muy triste y de a ratos llora de la angustia de enterarse que su perro estaba muerto y que no volvería.

Quienes son ellos para decidir si un perro vive o no, Farru era un perro sano y tenia una familia que le dio mucho amor, lo cuido por 3 años y lo reclamó hasta el

ultimo día. Tengo mucha bronca y angustia porque la Directora de Control Canino no me dio la posibilidad y oportunidad de ser la dueña de Farru y no conforme con eso mató un perro que tenía familia y en ella dos niños que lo esperaban.

No hay otra razón para haber hecho lo que hizo, más que tener el poder de hacerlo.

Farru no va a volver, pero no quiero que otro animal o familia sufran lo que sufrimos nosotros.

Farru no era un perro agresivo

Farru no tenía denuncias hechas

Farru no tenia multas en el juzgado de faltas

El Juez de Faltas NO Autorizo la eutanasia de Farru

Quienes eran dueños de Farru en el registro de control canino fueron engañados por agentes de Control Canino para firmar una autorización de eutanasia en lugar

de una puesta en adopción

A Farru lo sacrificó cualquiera y no un profesional veterinario como debería ser en esos casos

JUSTICIA POR FARRU, DESTITUCION DE LA DIRECTORA DE CONTROL CANINO”, finaliza el comunicado.