Empatía

La historia de Roberto: “No hagas ruido, por favor. Tengo autismo”

Roberto está acompañado por una gran familia de Río Gallegos que optó, a través de carteles fuera de su vivienda, informarles a los vecinos las cosas que le afectan, como la música fuerte, los ruidos de los camiones, los caños de escape y, en menor medida, la pirotecnia.

  • 28/12/2023 • 20:48
Los carteles explicativos fuera de la vivienda de Roberto.
Los carteles explicativos fuera de la vivienda de Roberto.
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El autismo es un trastorno del neurodesarrollo que afecta la forma en que una persona se comunica y relaciona con el mundo que lo rodea.

Las personas con autismo pueden tener dificultades en las interacciones sociales, la comunicación y a menudo presentan patrones repetitivos de comportamiento o intereses restrictivos.  El espectro autista es muy amplio, por lo que las personas pueden presentar una variedad de síntomas y niveles de gravedad.

Roberto, es un vecino de Río Gallegos que convive con el Trastorno del Espectro Autista y, ante las reiteradas situaciones de ruidos fuertes y molestos que le generaban altos niveles de malestar, junto a su familia decidieron poner, fuera de su vivienda, carteles que detallan: “No hagas ruido por favor, soy Roberto y tengo autismo” y “Soy Roberto y tengo autismo, me lastima la música fuerte, los ruidos de camiones, los caños de escape, sea solidario”.

TiempoSur se acercó a la vivienda y pudo dialogar con los familiares de Roberto, que contaron: “los carteles surgieron para concientizar y para explicar las situaciones porque Roberto con los ruidos muy fuerte les afecta de manera de que empieza a auto agredirse algunas veces y esto le pasa a esta familia como a otras, pero hay diferentes niveles a lo sensoriales en diferentes personas”.

Respecto a la pirotecnia, comentaron: “La pirotecnia no le afecta tanto, pero si los ruidos de camiones, los de escape libre y por eso surgió la idea de poner estos carteles para que se sepa que hay una persona con autismo y en el caso de que haya un tipo de crisis sepan, los vecinos que están pasando, por qué”.

Y agregó: “Hoy está mucho mejor que antes, gracias a los vecinos no hubo pirotécnica y Roberto la pasó muy bien, comió con nosotros y esos momentos los disfrutamos mucho más y le hacemos un cronograma para que sepa qué es lo que va a pasar”.

Tras ser consultado por las nuevas herramientas que implementan los comercios y la comunidad, indicaron: “Antes era como algo raro que no se hablaba y era más difícil, ahora hay supermercados que ponen horario para que ellos puedan ir. Hay chicos que les molesta hasta el tono de voz”.

De igual manera, exteriorizaron que: “Él mismo se expresa, hay días buenos y malos, como todos y creemos que la gente que está a cargo de distintas instituciones no escucha a los padres, no quiero que lo usen para política a mi hijo o a los chicos autistas y no hagan nada. Queremos hechos y tenemos que ser mas amigables con el otro y con pequeños actos es más que suficiente para que una familia esté feliz en Navidad o Año Nuevo”.

DATOS. La pirotecnia y el autismo.  La pirotecnia conlleva riesgos frecuentes y conocidos de quemaduras, lesiones en los ojos y trauma acústico. Otros efectos, menos conocidos son los que afectan a la población con autismo, discapacidad intelectual y también a las personas con estrés post traumático como los veteranos de guerra en quienes pueden reactivar recuerdos muy vívidos y angustiantes.

En este caso, las personas con autismo presentan hipersensibilidad sensorial y muchas de ellas, específicamente, hipersensibilidad auditiva. Es por eso que el umbral de tolerancia auditiva a determinados tramos de la frecuencia sonora, es muy bajo. Por esa razón el impacto que genera en ellas el sonido (aunque también las luces intensas, si presentan asimismo hipersensibilidad visual) produce reacciones que afectan a su conducta.

El trauma acústico consiste en una lesión en los mecanismos auditivos del oído interno debido a la exposición a un ruido muy fuerte, siendo una causa común de hipoacusia sensorial (daño de los mecanismos auditivos dentro del oído interno). Un ruido intenso puede perjudicar el órgano de la audición y llegar a afectar hasta al sistema nervioso central debido a que exista las neuronas del sistema nervioso pudiendo provocar daños temporales o permanentes ante la exposición de los ruidos fuertes por encima de 80 decibeles.

Qué provoca la pirotecnia en personas con TEA:

  • Genera un alto nivel de estrés y ansiedad.
  • Sienten miedo, lo que desencadena en crisis de llanto y gritos.
  • Muchas personas con TEA se desesperan y llegan a autolesionarse.
  • La perturbación por sonidos fuertes los pone tensos y los lleva a manifestar la molestia de una forma agresiva.

Cómo se puede asistir a una persona con TEA según la Asociación Argentina de Padres Autistas:

  • Trasladar a la persona con TEA a un espacio tranquilo donde los ruidos no sean de alto impacto.
  • Utilizar tapones de goma en los oídos para reducir el ruido.
  • Optar por auriculares con música que la persona con TEA conozca y que sean de su agrado.
  • Realizar actividades alternativas en esos momentos para redireccionar la atención a otros estímulos gratificantes.