Cambios positivos

Graduados en empatía

Miembros de la comunidad universitaria de la UNPA-UARG dialogaron con TiempoSur sobre distintas propuestas e iniciativas para transformar las tradicionales celebraciones que dañan la salud y el medio ambiente. Polvos de colores en lugar de harina y huevos, eliminar los globos del campus y plantar un árbol por egresado, son propuestas del futuro para los graduados en Río Gallegos de hoy. 

  • 16/12/2019 • 08:03
Se busca que las celebraciones sean más amigables con el entorno natural.
Se busca que las celebraciones sean más amigables con el entorno natural.

Cuando un estudiante logra finalizar sus estudios universitarios, la UNPA es celebración, aplausos y un abrazo a la educación pública y gratuita. Y el campus, se transforma en escenario de técnicos, licenciados e ingenieros que festejan desperdiciando huevos y harina en un contexto de emergencia alimentaria nacional. O se arroja papel picado, bebidas alcohólicas, espumas químicas y se regalan globos que terminan volando por el viento, en un contexto de emergencia ambiental municipal.

El personal de maestranza se esfuerza a diario y horas más tarde se encuentra nuevamente impecable, pero por mucho e innecesario tiempo, las puertas de bienvenida de la universidad de Río Gallegos, son muy pegajosas. Por eso Milagros Báez, estudiante de enfermería, comenzó a googlear sobre alternativas. Alternativas que no incluyan crueldad animal, que sean de fácil limpieza, que no sean tóxicas.

“A mí lo que en particular me molesta, es que son alimentos nobles desperdiciados” explicó a TiempoSur. Desde entonces comenzó su emprendimiento de polvos y pinturas de colores biodegradables llamados “Holy Splash”. Este también es una alternativa para la pirotecnia.

El uso de estas opciones es para Milagros “un motivo social”. La joven explicó que apuntan a la erradicación de la pirotecnia que además de herir a personas con TEA y mascotas, contamina. “Hay muchos que no saben que se puede festejar sin dañar a nadie” advirtió.

Y cuando se trata de llenar de color lavable en la universidad se trata, es uno de los ejes que intenta seguir la agrupación estudiantil Lista Naranja. Desde el espacio político comenzaron con una campaña para el centro de estudiantes y consejeros lanzaron “propuestas sustentables”. Comenzaron con la propuesta de prohibir globos en el campus.

La primera razón es la que afecta a Valeria Ojeda y a numerosos miembros de la comunidad universitaria, la ligirofobia. El miedo a las explosiones es real y evitable en la UNPA. “Que haya globos hace que no quieras pasar por ahí, es una fobia, no se puede tratar” explicó la graduada de “La Naranja”. La segunda y más obvia es que el plástico de los globos suele terminar en tierra, mares y ríos, tardando miles de años en degradarse. “Contamina, puede llegar a comerlo un ave” apuntó Ojeda.

Desde Integración Universitaria, Lista Naranja, están diagramando un pedido para presentar el año que viene que consiste en la designación de un predio para plantar un árbol por cada persona que se gradúe. De esta manera se generarían espacios verdes que colaborarían a la hora de combatir el cambio climático y la limpieza del aire.

Cabe destacar que, desde la unidad académica, el compromiso ambiental se tradujo en puntos de separación de residuos para su posterior reciclaje. Los espacios de plástico y cartón son fácilmente identificables en el hall y comedor universitario.

Los avances en materia ambiental, económica y empatía son un pequeño motivo de celebración frente a una numerosa generación de graduados, que sumó 42 nuevos profesionales en el acto de colación del viernes 19.