Navidad solidaria

Enrique Mansilla juntó dos mil juguetes para donar a los niños

El vecino ilustre de Río Gallegos dejó la obra pública a un lado por unas semanas y se dedicó a un evento solidario. Lo hace junto a su hijo Leandro. Este jueves regalarán lo donado en el Madres a la Lucha.

  • 17/12/2019 • 08:08
Enrique Mansilla.
Enrique Mansilla.

En los últimos años el vecino Enrique Mansilla se hizo reconocido en la ciudad y se ganó su propio espacio gracias a las actividades de mantenimiento y limpieza que el mismo encaró, viendo las necesidades que tenía la ciudad. Ahora junto a su hijo Leandro fueron por otra veta y apostaron a lo solidario, con el objetivo de llevarle una sonrisa a los chicos. Es que, con la llegada de fin de año, los regalos para Navidad pueden terminar siendo un dolor de cabeza para los padres, en especial para aquellos con bajos recursos. Ahí Enrique y su hijo crearon “Juntos hacemos la Magia”, convirtiéndose ellos y sus ganas de ayudar en Papá Noel. “La idea consiste en recolectar juguetes y recibimos dos mil. Además, nos donaron mil canastas navideñas” contó. Fueron largos días junto a su esposa e hijo de planificar, envolver y clasificar cada uno de los productos que les donaron, a fin de poder llevar la alegría a quien lo necesite.

Es que este jueves y tras un censo para ver las zonas más necesitadas de la capital, se realizará la entrega en el barrio Madres a la Lucha. “Tenemos que ver la cantidad de chicos en total”, contó a TiempoSur.

“Nosotros hicimos un censo para ver las necesidades, vemos que hay un merendero que comen chicos distintos horarios y distintas jornadas. Cada cuadra tiene una madre encargada de llevar los chicos al lugar”, señaló poniendo en contexto la decisión.

Consultado sobre cómo surgió la iniciativa, Enrique dio todo el crédito a su hijo, quien le pidió hacer algo juntos para ayudar a un tercero. Tras la grabación de un video que se volvió viral, le llovieron mensajes y llamados de todos lados, incluso de Buenos Aires o Córdoba. La repercusión fue inmensa.

“Todos empezaron a colectar juguetes. Fue una campaña de trabajo muy fino, porque tuvieron que quedarse (su familia) hasta tarde envolviendo juguetes, porque había que seleccionar, envolver” contó. Remarcó que entre los juguetes hay nuevos y en desuso en buen estado.