El día después del COVID

Mientras la comunidad científica busca una vacuna efectiva, el personal de la salud trata de entender las consecuencias que puede provocar el virus a aquellos que han estado expuestos. A lo largo de los últimos meses, una serie de estudios publicados sobre la observación clínica de aquellos que están en primera línea ofrecieron claves sobre las posibles secuelas de la enfermedad, aunque vale aclarar que es imposible determinar en este momento si esas posibles secuelas identificadas son temporales o permanentes. Entre lo ya publicado se sabe que algunos síntomas pueden persistir no solo en los casos más graves de la enfermedad y que, además del daño a los pulmones, puede afectar al corazón, los riñones, el intestino, el sistema vascular e incluso el cerebro. Por otro lado, en algunos de los pacientes recuperados se ha observado la disminución del volumen pulmonar, disnea de esfuerzo, atrofia muscular o alteraciones en la circulación. Con este panorama un grupo de profesionales de nuestra ciudad se ha unido para intentar trabajar junto a los pacientes recuperados una serie de alternativas que pueden ayudar a mejorar la situación de los pacientes. Se trata de los profesores de educación física Romina Corsini, Emanuel Carabajal y Elías Corsini, este último si bien está en Madrid (España), articula las clases vía Zoom. Además, también con la participación de la nutricionista Noelia Miranda, y el kinesiólogo Adrián Medvedoff.

En diálogo con TiempoSur, Romina comentó que “la idea surge porque tuvimos una alumna con COVID positivo que quería volver a retomar las clases y nos contaba que estaba con mucha dificultad respiratoria, que no se bancaba las actividades cotidianas y que se le había dificultado, por lo que nos pareció una buena idea hacer una activación, comenzar de cero, de forma consiente, con ejercicios respiratorios, articulares y musculares para ver cómo evolucionaba. Lo que hicimos fue organizarnos y ver qué podía aportar cada uno desde su lugar para que esta actividad fuera sana y a conciencia”.

En este trabajo, según expone la profesora, se han dado cuenta que “a muchos pacientes que han tenido COVID se les ha dado el alta y no tienen seguimiento. Están con muchas secuelas respiratorias, musculares y psicológicas también porque es frutaste no poder hacer lo que uno hacía antes. Anímicamente hemos visto gente que la está pasando mal, entonces se nos ocurrió la forma de darle la posibilidad de mejorarle la calidad de vida”.

Vale la pena mencionar que la actividad es totalmente gratuita y que, si bien se ha lanzado recién el pasado día lunes, al día de hoy cuenta con más de 20 inscriptos y no solo de la ciudad de Río Gallegos, sino que también pacientes de Buenos Aires, los cuales, a partir de hoy a las 16:30, podrán acceder a la primera clase mediante plataforma Zoom. “Aclaro que lo que damos no es una rehabilitación, nosotros no estamos capacitados para esto, pero sí lo que hacemos es generales una mejor calidad de vida, una activación muscular, articular y respiratoria para que la gente que pueda tener secuelas pueda sentirse un poco mejor”, manifestó la entrevistada y detalló: “Vamos a tener actividades físicas y respiratorias, con cosas simples. Una vez a la semana van a tener una entrevista con la nutricionista y una vez a la semana con el kinesiólogo, para ver las evoluciones”.

Por último, con relación a la respuesta de las personas, Romina comentó: “La verdad que estamos bastante asombrados. Nos dimos cuenta que hay mucha gente para ayudar, hay mucho trabajo para hacer, así que nos puso contentos que la gente se anime a confiar en el trabajo”. Las personas interesadas en participar se podrán comunicar al teléfono 02966 – 15406278, acto seguido recibirán una ficha médica “más que nada para saber cómo transitaron la enfermedad y qué síntoma tienen hoy”, y una vez terminado este paso se les envía el código de acceso a la reunión Zoom.