Aprendiendo a hacer algo útil con nuestra basura diaria

Durante el fin de semana la Asociación Ambiente Sur organizó un interesante taller de compostaje, del cual participó un buen número de vecinos y estuvo a cargo de Ivanna Fanin. De esta manera el Centro de Interpretación Ambiental de Río gallegos continúa brindando a la comunidad una atractiva agenda que tiene como principal objetivo el cuidado del medio ambiente y nuestras reservas naturales urbanas, pero también, como en esta ocasión, la educación ciudadana.

En esta oportunidad, el taller mostró como desechos de comida, cáscaras, yerba y otros residuos orgánicos que producimos a diario se pueden transformar en compos, “un poderoso abono orgánico que sustituye el uso de fertilizantes químicos y conserva la humedad de la tierra, entre otros beneficios”, contó la capacitadora, “para que puedas empezar a gestionar responsablemente tus residuos orgánicos”.

Ese 50% de la bolsa de basura que tiramos es materia orgánica en descomposición, por lo que su reutilización genera una reducción importante en lo que se refiere a los residuos domiciliarios.

Aunque siempre hay que empezar por la palabra “reducir”, hay residuos orgánicos inevitables que con el compostaje le damos otra vida. Devuelves al suelo materia orgánica, enriqueciéndolo de esta manera. Esto tiene efectos sobre la estructura del suelo, ya que el compost, al tener un alto contenido en materia orgánica tiende a formar terrones lo que ayuda a que el suelo esté aireado y no se compacte, favoreciendo la aireación y la humedad.

Además, el compostaje es importante porque se está perdiendo materia orgánica de los suelos. Esta pérdida de materia orgánica supone un riesgo de desertificación.