Blanquear el mural de Elizabeth “fue borrarla del mapa dos veces”

En Richieri y Don Bosco nació Cuerpas Ausentes, el mismo lugar donde vieron por última vez a Elizabeth de 27 años que fue víctima de femicidio en 2008. La esquina de Río Gallegos fue transformada en noviembre del año pasado. De un espacio de dolor y ausencia, las muralistas crearon un monumento en su memoria, con colores estridentes, su nombre, una figura en negro y la fecha de su asesinato. “Me parece un pisoteo al arte, a las formas de expresión y una falta de respeto” denunció Silvana Torres, que forma parte del colectivo de mujeres muralistas de Río Gallegos. 

El proyecto artístico busca generar un mapeo con murales, recordando a quienes han sido arrancadas del paisaje colectivo. La primera que recordaron fue a la joven que descuartizaron salvajemente hace más de una década. Silvana resaltó que esta pieza es además invaluable, ya que participó activamente Anne Brunswic, documentalista francesa que pintó y financió el mural, que estaba de visita por el fin del mundo y actualmente la separan miles de kilómetros de la Patagonia. Por su parte, Silvana, Cristina, Sabrina, Fiorella, Zurié y Juana continuaron en memoria de Romina Barría, pintando en el barrio San Benito para recordar a la víctima del único femicidio identificado como tal en la provincia. Y en memoria Marcela Chocobar, frente al local bailable de la calle Magallanes también llenaron de color un vacío. Uno de sus transfemicidas fue condenado a cadena perpetua la semana pasada tras años de espera y también es la primera vez que se reconoce esta figura legal en Santa Cruz.

Las miradas están sobre qué aparecerá pintado sobre el intento, intencional o no, de borrar a Elizabeth de la historia visible de Río Gallegos. “Creemos que tiene que ver con la propaganda, sólo queda esperar a ver quién pinta su logo sobre el homenaje, quién tiene tan pocos escrúpulos para tapar una pared que la recordaba” denunció. Pero resaltó que volverán a pintarla, que la conciencia colectiva en materia de género no puede “dejarse borrar”. Silvana destacó que la comunidad riogalleguense ya no olvida.

Cristina Vera, otra de las integrantes, destacó lo sanador del proceso para ella como artista. “Es ir tejiendo una constelación en torno a las ausencias” expresó a TiempoSur y confesó que al ver la pared blanca donde antes se recordaba a Elizabeth Adaro sintió dolor. “Nos duele que con sus campañas políticas borren tanto esfuerzo” agregó. Destacó que a través de los murales, cuentan historias que históricamente han sido invisibilizadas y que “Río Gallegos tiene mucho para contar y vamos a expresar estas injusticias”.

El equipo de Cuerpas Ausentes, en la actualidad se divide entre Córdoba y Río Gallegos. Desde las distintas latitudes han llevado la memoria traducida en rostro de mujer como bandera. En Argentina asesinan una mujer cada 24 horas y las activistas transfeministas sostienen que sólo muere quien se olvida, por ello y a pesar de la juventud del colectivo, estos hechos que consideran lamentables no las detienen a la hora de visibilizar las ausencias ya sea desde los colores con una silueta arrancada en un mural o en una marcha sosteniendo el rostro de las santacruceñas que conmemoran en alto.