Cuarto intermedio

Difícil es que se pongan de acuerdo. Sobre todo con el fútbol de por medio y con sus instituciones. Más cuando algunas de éstas movilizan grandes cantidades de gente o son generadoras de poder. Por eso, cuesta ver una asamblea desarrollarse con normalidad.

La de la AFA del 2015 es, simplemente, un ejemplo. Vale la pena recordar que aquella reunión, que buscaba un reemplazante para ocupar el sillón de Julio Grondona, terminó en una elección con un empate en 38 votos, dato que no llamaría la atención si no fuera porque los que sufragaron ese día fueron un total de 75 asambleístas. Esto terminó tiempo después con Marcelo Tinelli afuera de la Asociación del Fútbol Argentino y “Chiqui” Tapia manejando los destinos de la misma. La última, de Independiente, en la que renunció Hugo Moyano y se convocó a elecciones, también fue escandalosa. Aunque a otro nivel. Quedaron afuera de esta, una gran cantidad de socios; también los medios de comunicación. Todo se cocinó, entonces, entre unos pocos y a puertas cerradas.

Salvando las distancias, a fines del año pasado hubo elecciones en la Asociación Independiente de Fútbol de los Barrios. Se esperaba una lista y terminaron siendo tres. Los pronósticos previos daban a un ganador, pero la realidad se encargó de consagrar a otro diferente. Dicen que la política tuvo que ver. Que ese diablo metió su cola y torció el destino de la A.I.F.B., tal es así que finalizado el acto eleccionario de aquel momento se lo vio algún importante funcionario de nuestra ciudad fotografiándose con los miembros de la lista que resultó ganadora. Desde entonces, la Comisión Directiva que lidera Adolfo Cader gobierna en la Liga Independiente. Estos asumieron dejando en claro que la herencia recibida no era buena. Otro clásico de nuestro país y sus instituciones.

En casi diez meses de gestión los nuevos viejos dirigentes lo que hicieron fue intentar poner en orden la casa. El pasado sábado, los socios de la A.I.F.B. fueron convocados a una nueva asamblea, para algunos, de manera irregular. Es que la misma no se habría hecho por los canales legales correspondientes. El mitín dirigencial tenía, esta vez, un par de objetivos. Primero, blanquear las memorias y los balances de la institución. También buscar la aprobación de los socios de todo esto. Se esperaba un encuentro tranquilo. Quizás, en los más optimistas y, por qué no, utópicos de la Liga Independiente. Lejos estuvo de ser una asamblea normal. La primera parte de la misma empezó con las demoras del caso. Esto, gracias a tener que seguir con el protocolo establecido. Tras el ordenamiento inicial, se procedió a votar y se aprobaron las memorias y los balances del último ejercicio. Hubo algunas voces en contra pero en este caso fueron las menos.

La cosa se complicó después cuando se trataron las nuevas modificaciones que Cader y los suyos buscaban hacerle al reglamento.

La cuestión económica habría sido de los puntos más discordantes. Al parecer la intención de los propios es llevar el costo de la inscripción, en lo que a la categoría Primera A se refiere, de los poco más de $47.000 de la temporada pasada a los $84.000 (7 cuotas de $12.000) en esta. Las formas también, de todo, habrían sido un punto de conflicto entre las partes. Se discutió y mucho, según la versión de varios de los, por ahora anónimos, que estuvieron presentes.

La pasión se hizo presente en el recinto, lo que acaloró aún más el debate. Sin acuerdos, entonces, se tuvo que llamar a un cuarto intermedio. Será este próximo viernes que se vuelvan a juntar los asambleístas, a las 22:00, otra vez en la sede de la A.I.F.B.. De la aprobación del nuevo reglamente depende el inicio de la nueva temporada. El arranque se había pensado para dentro de un par de semanas aunque quizás la pelota tenga que esperar un poco más para volver a rodar por la Pino, la Nora Vera y las otras canchas de tierra.