Cortés, en Punta Arenas

Con la crisis sanitaria en su punto más crítico los organizadores del certamen se vieron obligados a no jugar, y a no hacerlo durante un par de años. Es que las restricciones del otro lado de la frontera continuaron en el tiempo, incluso, más allá de lo que se extendieron en el resto de esta parte del continente. Recién este año la vida retornó casi a la normalidad en la capital magallánica, lo que habilitó a las entidades deportivas a volver con sus actividades.

Fue así que se anunció, hace no mucho tiempo atrás, el regreso del Abierto de Magallanes. Para participar de la edición número 31 se anotaron más de 50 golfistas. La mayoría, locales. Entre los de allá se colaron algunos de acá. Como Carlos Cortés. También iba a ser parte de la acción Ángel Balceda, aunque éste faltó al primer día de juego. La acción comenzó el pasado miércoles. Fue ese día que se jugó un Proam, evento por golpes entre grupos de un profesional y un máximo de tres aficionados bajo la modalidad Fourball. Fue en la cancha del Club Naval que tuvo lugar este certamen con el que se rompió el hielo como quien dice. A continuación, los resultados del Proam: 1º Carlos Baquedano, Adolfo Suris y Ernesto Fernández 58 golpes; 2º Antonio Costa, Carlos Beros, Juan Beros y Javier Barría 61 golpes; 3º Luis Bustos, Fernando Borcoski y Matías Yacsic 65 golpes; 4º Rodrigo Viejo, Patricio Stein, Patricia Amarales y Hannah Casiello 65 golpes; 5º Dionisio Morinigo, Jorge Calvo, Clemente Yáñez y Ronald Vines 66 golpes; 6º Matías Venegas, Jaime Arancibia, Pablo Arancibia y   Matías Sánchez 66 golpes; 7º Jorge Klain, Damián Muriel, Raúl Román y Carlos Cortés 66 golpes y 8º Manuel Pichún, Cristhofer Maldonado, Bernardo Núñez y Rodrigo Sirón 67 golpes.  

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