Columna de opinión Trámites judiciales: los avances desde la pandemia La pandemia del Covid 19 generó de manera impensada una obligatoria agilización de todos los trámites judiciales. Nuestro país y nuestra provincia no estuvieron ajenos a esta contingencia. 30/05/2023 • 16:32 | Por Yamila Borquez (Judiciales) 1 + Enviar nota Imprimir COMPARTÍ ESTA NOTA Sin mediar transición alguna, todas las tramitaciones dejaron de emplear el formato papel. En el Poder Judicial se implementó un moderno sistema de expediente digital llamado SIPED (Sistema de Presentación de Escritos Digitales), que permite gestionar en modo home office desde los domicilios o los estudios jurídicos todo lo que antes se hacía en el mostrador de los juzgados. A través de este sistema, se puede acceder en forma remota a todas las actuaciones mediante un código de usuario puesto a disposición de los actores judiciales. Así comenzó a funcionar en todos los fueros: Civil, Comercial, Familia, etc. aunque no se utiliza en su totalidad en el fuero Penal, donde sigue rigiendo el expediente papel porque existe un sistema de trabajo. Hay que reconocer que todas estas modificaciones han venido claramente a facilitarnos las tareas a los abogados, porque podemos tener las veinticuatro horas el acceso a nuestras causas para trabajar en ellas. De este modo se gana mucho tiempo y existen ventajas tanto en lo económico como en lo ecológico, por el enorme ahorro de papel. También aparecieron las audiencias virtuales, realizadas a través del servicio de video conferencias Microsoft Teams. De este modo, los involucrados se puede conectar desde sus domicilios por vía remota. Aún con todas estas facilidades, nada puede compararse con una audiencia presencial. Lo más importante que se pierde en el universo virtual es lo que se llama “inmediación”, el contacto directo y real que permite recibir las declaraciones de otra manera. Sensaciones, sentimientos, expresiones. Todos esos gestos humanos que se quedan afuera. El atraso administrativo que generó la pandemia en la Justicia fue muy grande. Durante largos siete meses sólo se trabajaron las causas más urgentes y si bien vamos periódicamente recuperando terreno, todavía se sienten las demoras. Igualmente es muy positivo que la Justicia y sus actores nos aggiornemos y estemos a la altura de los cambios de estos tiempos, porque era real la necesidad de crear un sistema y ajustarse al escenario que provocó el Covid 19. Hoy, a mediados de 2023, la Justicia volvió a su funcionamiento habitual y este año ya podremos ponernos un poco más al día con todas las tramitaciones. En materia penal había muchos juicios postergados que van actualizándose. Este avance ya nos permite funcionar adecuadamente. Se agilizó y se dio comodidad a los trámites, pero todavía la realidad de los ciudadanos está muy lejos de la tutela judicial. Como siempre ha ocurrido, los tiempos de la justicia no son los tiempos de la gente. Temas columna de opinion COMENTÁ Lás más leídas en Columnistas Lás más leídas en Columnistas