Malestar de ganaderos por presunta inacción ante nuevos casos de abigeato

Luego de que en los últimos días tomara estado público un nuevo caso de abigeato, con la sustracción de más de 30 ejemplares ovinos en una estancia ubicada entre Pico Truncado y Fitz Roy, empresarios ganaderos manifestaron su descontento con el limitado alcance de las acciones llevadas a cabo por las fuerzas policiales y los estrados judiciales, en casos en los que existen pruebas fehacientes de quienes fueron los responsables.

El hecho fue alertado, cuando un vecino encontró 32 cueros de oveja tirados en el basural. Un empresario ganadero de Pico Truncado detectó la posible procedencia de los ejemplares y notificó a sus propietarios. Habrían sido extraídos de la estancia “La Querencia”, ubicada entre dicha ciudad y Fitz Roy.

Al recorrer el predio, cerca de un esquinero, dicha presunción se corroboró: encontraron todas las panzas carneadas, tiradas en el suelo y cuatro animales enteros degollados, que se supone no entraron en el vehículo utilizado para trasladar los ejemplares anteriores.

El hecho fue denunciado ante estrados judiciales y fuerzas policiales, y se demoró que salga a la luz, esperando no entorpecer las investigaciones. Sin embargo, al no notar avances en la ejecución de un efectivo castigo a los delincuentes, los propietarios ganaderos decidieron hacer público este nuevo caso de abigeato, un delito que se está convirtiendo en cotidiano en las estancias de la zona.

Básicamente, el malestar remite a que, en la mayoría de las ocasiones, existen pruebas fehacientes que permiten dirigir la investigación hacia quienes podrían ser los potenciales culpables. En este caso, se tuvo conocimiento de una camioneta que se encontraba estacionada en la zona urbana de Pico Truncado, literalmente chorreando sangre y no se emitió una orden de allanamiento, ni se realizó ninguna intervención policial de oficio.

Hace algunos meses tomó amplia repercusión un intento de robo en una estancia de la misma zona, que originó una persecución y un tiroteo, y los malvivientes debieron abandonar el vehículo. El mismo está secuestrado, pero no se avanzó en la investigación.

Estas situaciones generaron el descontento de los ganaderos, por la falta de respuestas. Según manifiestan, desde la policía argumentan que el Juez no emite la orden de allanamiento. Desde el Juzgado, replican que nunca les llegaron las denuncias. Inicialmente, los propietarios de estancias denunciaban inacción de las fuerzas judiciales y policiales, pero en los últimos días fueron más allá y manifestaron sospechar complicidad de los altos mandos. “En Truncado se sabe quiénes hacen este tipo de carneadas. Ya no es que nadie hace nada, alguien hace algo para que no los metan presos” señalaron. (Fuente y foto: Centenario Sur)