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Vecinos solicitan a los mismos ciudadanos por el cuidado de los espacios recreativos

En Río Gallegos no son muchas las opciones recreativas al aire libre, fue por eso que tras ser consultados, los habitantes pidieron a los mismos vecinos que cuiden las plazas, ya que observan juegos rotos y paredes rayadas, resultando perjudicados los niños.    

  • 23/08/2014 • 00:00
Sector de hamaca en el cual faltan dos.
Sector de hamaca en el cual faltan dos.

En días con gran clima en la ciudad de Río Gallegos, son pocos los espacios recreativos que hay para salir y disfrutar del sol y las altas temperaturas no son tan habituales y cuando llegan todos quieren aprovecharlo.
Al profundizar sobre qué lugares elije la gente para salir a tomar mates, pasear, jugar con sus hijos y demás, los ciudadanos mayormente se inclinaron por la costanera. Asimismo, no faltaron quienes proclamaron por la generación de nuevos lugares y los que hicieron foco sobre los hechos vandálicos que realizan algunas personas en las plazas.
Los espacios verdes no abundan en Río Gallegos y por tal motivo, una gran cantidad de personas se dirige a la costanera local: “Siempre vamos porque los nenes pueden andar en bicicleta mientras tomamos mates. Además, preferimos venir acá y no que anden en la calle”.
A su vez, quienes no optaron por la ría, elijen alguna plaza cercana y a su vez, realizaron un llamado de atención por el mal estado de las mismas. “Mucha gente pide a los cuatro vientos juegos para los chicos y reclama más espacios recreativos, pero se puede ver constantemente que las hamacas, los toboganes y demás están rotos”. Y en este sentido, otro vecino agregó: “Es imposible que un pequeño rompa la cadena de una hamaca. A la noche he visto que se juntan a tomar y rayan las paredes o se cuelgan, le tiran piedras a ver quien tiene más puntería”, entre otras cosas.
Es por esto que varios ciudadanos hicieron un llamado de atención, para que “seamos todos más cuidadosos, ya que no se gana nada con rayar una pared o romper algo, los únicos que perdemos somos nosotros y los niños que después no pueden disfrutar de un espacio que justamente está predeterminado para ellos”, exclamó. 
En este sentido, diversas voces proclamaron por más control durante las noches, “porque en muchas se juntan grupos de chicos y a uno le genera cierto temor a la hora de pasar por ahí. No por juzgar, pero a quién no le daría miedo, toda persona evitaría pasar por ahí”, explicó.
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