Piden que la emergencia económica no incluya a salud

Integrantes de APROSA- Asociación de Profesionales de la Salud- esperan mantener una reunión mañana con el ministro de Salud, Hernán Martínez Crespo, con el fin de preguntarle si el paquete de medidas económicas de ajuste que aprobará la Legislatura el jueves en sesión extraordinaria incluirá al sector de la salud, dado que a entender de la asociación esto no debería suceder teniendo en cuenta el complejo panorama de los hospitales santacruceños.  

“Queremos saber si la emergencia económica incluye o no salud, porque debería quedar afuera porque no tenemos profesionales”, marcó a TiempoSur el ingeniero Hugo Gerez, secretario gremial de APROSA. 

“No sabemos si el presupuesto  2012 contempla el aumento de salarios de salud, porque no debería haber recortes”, afirmó.

Este encuentro también tiene el objeto de conocer si los legisladores aprobarán el pase de leyes de los empleados de la  sanidad. “Se trata de los enfermeros de las Leyes 1200 y 591 que deberán pasar a la Ley 1795 para ser considerados como profesionales con carreras universitarias”, aclaró Gerez. (Este cambio fue aprobado en las últimas reuniones paritarias). 

 

Menos médicos 

Debido al periodo vacacional, Gerez advirtió que en el Hospital Regional de Río Gallegos disminuirá la presencia de especialistas. Habrá aproximadamente un cirujano cada 15 días, de un total de cuatro profesionales. “Aparentemente  cortaran sus vacaciones para estar ese tiempo nada más”, indicó.

(Durante el año emigraron de la salud pública por lo menos 39 profesionales).

Durante el mes de febrero habrá tres cardiólogos (uno full time y otro par time), de un total de seis que conformaban esta especialidad anteriormente. Es que de este total, un médico se jubiló, el siguiente dejó la salud pública; y en febrero el tercero renunciará. 

En el nosocomio  no hay ningún gastroenterólogo ni endocrinólogo.

A esto se le suma la carencia de psiquiatras en el área de Salud Mental, que cuentan con tres, frente a los ocho que había antes.   

Lo mismo sucede con los oftalmólogos. “Quedan tres nada más. Habían cinco y se fueron yendo de a poco ya sea por régimen de trabajo o por sueldos”, indicó Gerez.

“Hay un desmanejo y no se saben cuáles son las prioridades. Estamos a la deriva porque no sabemos qué va a pasar”, alertó.