Triple choque y un auto secuestrado

Durante la tarde y tarde-noche de ayer, el personal policial de la ciudad capital tomó intervención en dos colisiones vehiculares ocurridas en distintos puntos de la ciudad de Río Gallegos.

El primero de ellos tuvo lugar pocos minutos después de las 18:30, en la zona céntrica capitalina, más precisamente en cercanías a las instalaciones del Club Atlético Boxing Club, en jurisdicción de la Comisaría Seccional Primera.

La colisión –afortunadamente de menores consecuencias- se produjo a metros de la esquina de las calles Bernardino Rivadavia e Hipólito Yrigoyen, tomando parte en ella dos rodados particulares.

Uno de ellos –una camioneta Renault Sandero de color azul, a bordo del cual viajaba un grupo familiar- impactó con su parte frontal a otro automóvil, sufriendo ambos daños menores en sus carrocerías.

Afortunadamente, las consecuencias del “palo” no pasaron a mayores, no debiéndose lamentar ninguna lesión de consideración entre los involucrados e interviniendo los agentes de policía solo de forma preventiva.

El siguiente accidente –que ocurrió pasadas las 20:00- sí fue de mayor entidad, viéndose involucrados en el mismo tres rodados particulares, uno de los cuales debió ser retirado por medio de una grúa.

Fue en una intersección vial del barrio San Martín de la capital, más precisamente en la esquina de las calles La Manchuria y Obispo Enrique Angelleli, a pocas cuadras de la Laguna Ortiz.

Fue hacia dicho lugar donde debieron acudir los agentes de la Comisaría Seccional Tercera -actuante por jurisdicción- y de la División Tránsito Policial, tras ser notificados de una posible colisión con lesionados.

Al llegar al sitio, los efectivos pudieron advertir que habían chocado entre sí dos rodados particulares de modelo Fiat Siena. Uno de ellos –de color rojo- avanzaba sobre La Manchuria a los mandos de un joven de unos 25 años de edad.

El otro, color gris acero, circulaba por Angelleli, conducido por una mujer de unos 25-30 años de edad, quien –por motivos que aún son materia de investigación- falló en conceder el paso al rodado ingresante por mano derecha.

En consecuencia tuvo lugar una colisión entre ambos coches, impactando el rodado de color rojo contra la puerta delantera derecha de aquel conducido por la joven, quien perdió el carril.

La conductora no alcanzó a recuperar el control de su vehículo, el cual terminó golpeando contra la parte trasera de un Peugeot 505 de color azul, perteneciente a un vecino del barrio y que se encontraba estacionado sobre mano izquierda.

Inmediatamente, los agentes solicitaron una ambulancia al Hospital Regional, de manera preventiva y ante los dolores que manifestaba el conductor del Siena rojo, a quien auxiliaron para bajar de su vehículo.

El mencionado móvil sanitario arribó al lugar a los pocos minutos, con lo cual el personal médico pudo brindarle al joven los primeros auxilios de rigor, procediendo luego a transportarlo al nosocomio antes citado.

El accidentado permaneció allí durante las siguientes dos horas, certificando los facultativos de turno que –afortunadamente- solo había padecido lesiones de carácter leve, siendo capaz posteriormente de retirarse por sus propios medios.

En cuanto a la conductora del otro Fiat, la misma no debió lamentar heridas de gravedad – tan solo la conmoción propia del impacto- permaneciendo en el sitio junto con los agentes.

Por otra parte, los efectivos policiales procedieron a bloquear el acceso vehicular sobre Obispo Angelleli, en virtud del trabajo de peritaje y remoción de los vehículos accidentados que se estaba llevando a cabo.

El personal de Tránsito Policial llevó a cabo también la revisión de la documentación correspondiente a los conductores y sus vehículos, comprobándose faltantes en la del Siena color acero.

Por ese motivo, el rodado en cuestión quedó secuestrado, colocándosele las correspondientes fajas indicativas. El mismo permaneció en el sitio hasta pasadas las 21:30, cuando fue retirado del sitio por una grúa municipal.