Vacunas que no llegaron: El pedido original de donación y lo que ya había vaticinado un intendente

15 Mil dosis de Pfizer y Sinovac que iba donar Chile no fueron aceptadas por Argentina, según informó el ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Andrés Allamand, en una nota enviada a la Presidenta del Senado de este país, quien había solicitado enviar estas dosis en base al requerimiento del senador Carlos Bianchi.

El pedido de vacunas nació en marzo, por parte de la referente de residentes chilenos en la Cuenca Carbonífera, Lidia Villarroel, pero no podrán llegar a la Cuenca Carbonífera porque ambos laboratorios no fueron autorizados por la ANMAT para su aplicación.

Aunque el Senador chileno adelantó ayer que insistirá con la donación de vacunas, con Villarroel fue con quien comenzó todo. "El pedido fue porque somos tantos chilenos... Y hasta ese momento no se sabía cuándo iban a llegar las vacunas", indicó a TiempoSur.

La referente contó que habló con el senador Bianchi, a quien conocía desde antes y así "comenzó a hacer las gestiones".

Pero el pedido originalmente fue para los chilenos que residen en la Cuenca Carbonífera, que imposibilitados de viajar a su país por el cierre de fronteras querían ser inmunizados en su país, el cual junto con Israel, fueron los primeros en vacunar la mayor cantidad de población objetivo en el mundo.

"Yo no pedí tantas vacunas", resaltó Villarroel y dijo que era solo para los chilenos, aunque cuando lo planteó al senador "él dijo que si conseguía, era para todos porque no debíamos discriminar, con lo cual tenía razón".

Villarroel estima que en la Cuenca residen aproximadamente 7 mil chilenos.

La no aceptación de vacunas por parte de Argentina, no le llamó la atención.

"No me llamó la atención porque creo que hay muchas trabas, mucha burocracia y esto no tendría que pasar. Nosotros estamos tan cerquita que se deberían agilizar las cosas", opinó.

Las "trabas" no fueron solo de Argentina. Contó que antes de efectuar el pedido de vacunas al Senador, había tratado este tema con el referente de los residentes chilenos en 28 de Noviembre, José David Millalonco. "Él (Millalonco) me dijo que lo había hablado con el Cónsul (chileno en Río Gallegos) y el Cónsul dijo que no se podía... Le dio muchas vueltas. Yo planteé que había gente que se estaba muriendo y por eso le dije a Millalonco que hable con el Cónsul, quien dijo además que se debía hablar con la Cancillería en Santiago de Chile", añadió.

Villarroel volverá a entablar el diálogo con Bianchi.

En Chile -destacó- hay 700 jubilados "que viven allá pero tienen familia acá (en la Cuenca). En mi caso, una hija mía vive en Puerto Natales, y como yo, hay un montón gente".

La mujer (61) ya fue vacunada con dos dosis, aunque resaltó que deberían vacunar a los trabajadores de YCRT.

Debían habilitarse

"Cuando el senador Bianchi hizo la propuesta, lo primero que dijimos fue que como esas vacunas no se aplican en Argentina y debían habilitarse por la ANMAT, era una cuestión lógica", recordó a TiempoSur, Darío Menna, intendente de Río Turbio.

El Jefe Comunal no estaba en contra de la donación, aunque siempre advirtió que las negociaciones lo superaban, porque se realizaba entre Cancillerías.

"Esto es algo que supera a intendentes porque no tenemos la autoridad para solicitar que se autoricen" las vacunas.

Río Turbio vacunó aproximadamente al 20% de la población, con 3200 personas.

"Todos los días reclamamos vacunas", recalcó. De hecho pidió al Gobierno provincial incluir a trabajadores municipales esenciales de áreas que no recibieron las dosis, frente a los que sí fueron inoculados, como fue el caso de Recolección y Cementerio.

Esto incluye a trabajadores de Tránsito y de Abordaje Territorial que "están en la calle", asistiendo con módulos alimentarios a los vecinos.

También solicitó que se vacune a trabajadores de una obra social que "atiende a vecinos en general" y empleados de la Central Termoeléctrica, que serían entre 17 a 20 personas.

"Ese personal garantiza el servicio de energía eléctrica", argumentó.