Uno terminó y el otro está en juego

Se trata de “Lucho” Fernández. El equipo que dirige Flavio Sosa consiguió su pasaje a Chapadmalal el pasado lunes. Lo hizo sin jugar. Es que tenía que definir la etapa provincial en un mano a mano con Río Turbio. Dicha serie se iba a disputar en nuestra ciudad pero todo terminó cuando el equipo de la Cuenca Carbonífera se bajó de la competencia, lo que automáticamente le dio la victoria y la clasificación al conjunto capitalino.

La cosa no había empezado bien. Es que la sede para la etapa provincial iba a ser, en un principio, Pico Truncado. En el norte de nuestra provincia la idea era disputar un triangular entre el local, Río Turbio y, por supuesto también, “Lucho” Fernández.

Antes de la deserción de Río Turbio, el que abandonó el certamen fue Pico Truncado. Con su decisión de, finalmente no jugar, éste dejó al certamen con un equipo menos y también a la competencia sin lugar para jugar. La Secretaría de Deportes, ente organizador de dicha etapa, tuvo que rearmar de la nada, y con poco, el clasificatorio. Surgió entonces la posibilidad de jugar el mano a mano entre rioturbienses y riogalleguenses en esta ciudad. Lo hecho fue en vano, porque después la actividad tuvo que suspenderse por fuerza mayor.

En el femenino, también la clasificación se dio vía escritorio como quien dice. El que pasó sin jugar la etapa provincial, por no presentación de más equipos, fue El Trébol de El Calafate.

La que se está disputando ahora, en la ciudad del Gorosito, es la eliminatoria del fútbol, con cuatro equipos en la rama masculina (Caleta Olivia, Río Turbio, 28 de Noviembre y El Calafate) y tres en la femenina (Caleta Olivia, El Calafate y Río Gallegos).