Se despidió compitiendo

El Santo barrió la primera serie que le tocó jugar. Fue en Tierra del Fuego, frente a Club de Amigos. También, los dirigidos por Roberto Carballo pasaron la escoba en el segundo playoff. Esta vez, en Neuquén, en donde eliminó al campeón de aquella provincia, Independiente. Hasta ahí, San Miguel venía sorteando cada escollo deportivo. Además de ganando la batalla económica y de logística. La Confederación Argentina le propuso al Bordó un desafío mayúsculo. No sólo por tener que enfrentar a otro campeón provincial, ahora el de Chaco, sino porque además iba a tener que cruzar todo el país para poder jugar este nuevo compromiso. Gracias al esfuerzo de dirigentes y padres, viajó a Villa Ángela soñando con meterse entre los ocho mejores equipos del país. La cosa empezó bien en el norte. San Miguel se llevó un importante triunfo por 67 a 62 en el primer partido. En la revancha, disputada ayer, al local les salieron todas las cosas bien. A los chicos del Santo, no tanto, pero se los vio sin bajar los brazos y peleando hasta el mismísimo cierre del encuentro. Unión Progresista se impuso por 71 a 45 y se quedó, por diferencia de goles, con la serie.

El Santo se despidió compitiendo y con el pecho de los propios inflados de puro orgullo.

Hispano también quedó eliminado en esta fase. El Celeste cayó con Centro Español por 92 a 58 y 76 a 45.