Policía no recibió notificación legal para responder ante la denuncia de apremios

El caso de Jesica Minaglia sigue siendo investigado por el Juzgado de Instrucción y del Menor de Puerto San Julián, fue así que el miércoles en horas de la noche y madrugada del jueves de la semana pasada, los efectivos de la División de Investigaciones con apoyo de los uniformados de la Comisaría Primera, procedieron a realizar el allanamiento en la vivienda de calle Mitre al 300; debían secuestrar el teléfono del testigo clave en la causa, ya que éste tendría audios en los cuales Jesica le contaba el calvario que estaba viviendo con su ex pareja.

El procedimiento fue ordenado, ya que el testigo habría filtrado información que no habría aportado a la causa cuando dio su testimonial ante la jueza de la causa.

Esa madrugada, durante el allanamiento, el testigo no se encontraba y cuando regresó y vio todo el movimiento de policías decidió emprender la huida, pero a los pocos metros, los uniformados lo demoraron, ya que éste se habría caído de su bicicleta.

Este medio pudo conocer que, en ese momento, el testigo habría presentado aliento etílico, además de algunos raspones por la caída, por lo que los policías solicitaron una ambulancia para que lo asistiera.

Fuentes oficiales de Jefatura de Policía confirmaron que el testigo radicó una denuncia por apremios ilegales, en la cual habría manifestado haber sido golpeado por varios policías que serían amigos del cabo de policía, detenido y ex pareja de Jesica.

Por último, se supo que hasta ayer, la policía no recibió ninguna notificación legal para que responda sobre el trabajo de los efectivos que intervinieron esa noche.