La CAFS y una medida que ayuda a los clubes

Cuando todo parecía que terminaba ahí, con el anuncio de la cancelación total del calendario nacional, los dirigentes de la Confederación Argentina de Fútbol de Salón sorprendieron. Primero con, en poco tiempo, haber tenido un nuevo encuentro virtual. Después, con algunas de las decisiones que se tomaron durante el mismo. La más importante, entre las últimas decisiones, fue el ajuste realizado sobre el arancel federativo. Sí, la CAFS decidió, por lo que resta del año, bajar la cuota de los saloneros.

Vale la pena recordar que la misma incluye el seguro deportivo de cada persona.

Fijó entonces a esta en $200. Lo hizo pensando en la situación general del país. En la falta de actividad e ingresos que están soportando los clubes de nuestro país a razón de la pandemia del Coronavirus. También en que las máximas competencias fueron todas suspendidas y ya no se van a jugar en esta temporada. Además, y por último, que no está clara la situación interna de cada asociación. Ni el futuro de las mismas. Es decir, que no se sabe siquiera si podrá haber algo de competencia local este año. Y de ser posible que los equipos jueguen solamente en su casa, los torneos tendrían un formato y una durabilidad diferente a la normal. Motivos todos, entonces, que llevaron a los dirigentes de la CAFS a tomar esta buena y apropiada medida.

La misma todavía no fue anunciada de manera oficial. Seguramente se tomarán algunos días más para hacerlo. El tiempo no los corre, ya que la cuarentena sigue firme, con algunas flexibilizaciones, en todo el territorio nacional.

La reducción efectuada en la cuota federativa es por demás significativa. Es importante destacar que, a principios de este año, la misma había sido fijada en $560. Según se supo, la inquietud fue llevada ante el Comité Ejecutivo de la CAFS por Héctor Cárdenas. Éste, miembro de este cuerpo pero también integrante de la Federación Santacruceña y referente máximo en la Cuenca Carbonífera.

En la última reunión federativa se trató este tema. La decisión de los representantes santacruceños fue pedir a las autoridades de la CAFS el prorrateo correspondiente por lo que queda de la temporada. El pedido de Cárdenas, y los otros, cayó bien entre las máximas autoridades saloneras de nuestro país. A tal punto, que dieron luz verde a éste.

La pelota ya rueda

La cancelación de la temporada nacional por parte de la CAFS se dio en el momento que las provincias, algunas por cierto, empezaron a permitirle a los clubes la vuelta a las canchas. Todo de manera muy especial. Con grupos reducidos y entrenamientos orientados a la parte física y también de técnica individual. Siempre, protocolo sanitario mediante.

Las primeras en salir del aislamiento y retomar las prácticas saloneras fueron Misiones, Chubut y Tierra del Fuego. Aunque la segunda, en los últimos días debió retroceder de fase, con la nueva suspensión de las actividades, debido a un rebrote en algunas ciudades, como por ejemplo, Comodoro Rivadavia.

Hace unos días, Mendoza se sumó a la lista de las provincias en las que volvió la acción. Se especula con que en el corto tiempo, sean otras las que vayan siguiendo los pasos de las antes mencionadas.

En la Cuenca

El propio Cárdenas fue uno de los dirigentes que estuvo cuando la CAFS decidió aplazar todos los torneos nacionales. Y fue uno, también, de los que estuvo de acuerdo con la medida. Así, lo manifestó: “Hay que entender la realidad del país en cuanto a la salud. Partiendo de allí los dirigentes acordamos que no se realicen las competencias nacionales este año. Es que, por ejemplo, para viajar al torneo de la División de Honor, que estaba previsto que se dispute en Río Gallegos en la segunda parte de la temporada, los clubes del norte que se mueven en avión iban a tener que pasar sí o sí por Buenos Aires. Con toda la situación que se está viendo allí, de las más complicadas, hubiese sido un gran riesgo para todos. Ni que hablar que no sabemos qué va a pasar con la movilidad interna, ni por vía terrestre ni por vía aérea. Más allá del riesgo que mencionaba antes. Por todas estas dificultades fue que decidimos suspender los campeonatos y pasar el calendario como estaba para el 2021”.

La única opción que aparece en el horizonte para ver salón este año parece girar en torno a los torneos locales.

Respecto a esto, el hombre que manda en la Cuenca Carbonífera, manifestó: “Sé que va ser difícil volver con la actividad. Tener plena competencia cada fin de semana. Las cosas, creo yo, que se van a tardar un poco más hasta que se pueda volver a una total normalidad. Sin embargo, estamos trabajando con los directores de deportes para ver cuándo se pueden volver con los  entrenamientos primero y luego con la competencia. La temporada regular de A.Fu.Sa. como estamos acostumbrados, no se va a poder realizar. Por una cuestión de tiempos también. Por eso, estamos pensando en hacer campeonatos cortos”.

En la Cuenca Carbonífera, en los últimos días, fueron muchas las actividades habilitadas para volver. No sólo individuales sino también grupales, como el básquet por ejemplo.

Se estima que en los próximos días, de no mediar nada raro, el salón podría estar recibiendo también el OK por parte de las autoridades locales. De ser así, la región se convertiría en la primera en permitir el salón dentro de la provincia.

(Fuente: Te Paso la Pelota)    

En la capital

A.Fu.Sa. de Río Gallegos tiene que dar un paso antes de poder pensar de lleno en la reactivación de la competencia. Y antes también, de los entrenamientos.

En estos momentos, la entidad capitalina está siendo manejada por una comisión normalizadora, la cual está esperando el OK de personería jurídica para celebrar su Asamblea General y así poder definir algunas cuestiones. Entre éstas, quién gobernará a la institución por el próximo período. Si bien, en principio, habría una lista opositora, por lo hecho en los últimos años, la oficial es la que tiene más chances de renovar sus cargos.

Una vez se tenga esto, lo demás se decantará por sí solo prácticamente.

De continuar todo, sanitariamente como hasta ahora, la Asamblea podría llevarse a cabo en cuestión de semanas o un par de meses, como máximo. Mientras tanto, se avanza con reuniones para la vuelta de los equipos a los entrenamientos.