Automovilismo

El TP piensa en los preparadores

En las últimas horas el Turismo Pista salió a brindarles ayuda económica a los preparadores que tiene la categoría. Lo está haciendo a través de una serie de préstamos. Estos, por un monto de mil dólares y con la idea que sean devueltos recién el año que viene. Para eso se establecería un plan de cuotas de 100 dólares cada una. De esta manera, la categoría en dónde están compitiendo este año Cristóbal Riestra y Thiago Martínez salió a hacerle frente a la crisis económica que afrontan los equipos debido a la pandemia del coronavirus.

  • 25/05/2020 • 07:50

La situación por la que atraviesa el mundo en general, es complicada. Nuestro país, claro, no está exento a nada de esto. Ni a lo que tiene que ver con la propagación del coronavirus y tampoco a sus consecuencias. Desde las sanitarias hasta las político-económicas.

Que la pandemia está pegando duro, es evidente que sí. Y que en muchos casos está despertando el lado más solidario de la gente, también. Llámese igual entidades o asociaciones. Entre este último grupo, se encuentra la APTP. Esta, no es otra más que la institución que nuclea a las carreras de auto de una categoría nacional como es el Turismo Pista. En ahora sus tres versiones, la Clase 1, 2 y 3.

Entendiendo la situación financiera por la que pasan los equipos, con este parate obligado de la actividad, la entidad madre del TP salió a intentar dar algunas respuestas. Y a ayudar, de cierta manera, a quienes con su trabajo son parte importante dentro de la categoría.

En esta ocasión, serán los preparadores los beneficiarios de una especie de salvataje económico. Según una publicación que hiciera días atrás el sitio web Bandera a Cuadros, los dirigentes de la APTP pondrán a disposición de quienes lo necesiten, y cumplan la función antes mencionada, la cantidad exacta de mil dólares. Lo harán a manera de préstamo, sin interés alguno, y para ser devuelto recién el año que viene. Respecto al retorno del dinero hacia la APTP el mismo se llevaría a cabo por medio de un plan de cuotas, de 100 dólares cada uno.  

Es importante destacar que la medida alcanza sólo a quiénes, por necesidad, quieren hacer uso de la misma. Quedará entonces a juicio y buen entender de los propios profesionales del automovilismo si acceden o no aceptar este apoyo por parte de la APTP. En que caso que sí lo necesiten, pueden solicitarlo ahora o bien más adelante vaya transcurriendo la temporada. Los trámites quedarán ya en la intimidad de los preparadores y de la propia institución.

Otras ayudas de la APTP

Según reza el mismo artículo, no es la primera vez que la entidad madre del TP sale a darles una mano a sus “asociados”, por llamarlos de alguna manera. Esto parece ser algo que sin ser recurrente, pasó en más de una oportunidad. De acuerdo con los conocedores de la historia de la categoría, hace un par de años atrás, cuando se buscó dar un salto hacia la profesionalización de la categoría sucedió algo similar. Cuentan, entonces, que en el 2017 el sistema de comunicación pasó a ser obligatorio en el TP. En ese momento, fue que la APTP decidió cubrir parte de los gastos que esto significaba como para lograr un número más accesible para los equipos. Lo mismo pasó este año, cuando se decidió cambiar al proveedor de los frenos para los autos.

Más atrás en el tiempo, la categoría tuvo un gesto grande y particular con Carlos D’Antonio y Martín Fierros. Un desperfecto mecánico en la zona de boxes terminó incendiando el lugar y con este, a los autos de los pilotos antes mencionados. El foco ígneo alcanzó también a parte del material de trabajo del equipo Antolin Competición. Tras este incidente, los dirigentes de la categoría decidieron ayudar a ambos pilotos construyéndoles un par de autos nuevos. Además, le repuso los elementos perdidos al equipo de la familia mendocina.

El último de los gestos, antes del actual, se vio el año pasado. Buscando la federalización de la categoría, el TP llegó a Misiones. En el autódromo de Oberá se corrió la primera carrera del Turismo Pista en tierra colorada. El haber decidido mudar la competencia hasta ese lugar iba a necesitar, fundamentalmente, un esfuerzo económico grande por parte de los equipos. En lo que a traslado y demás se refería. Pensando en eso, la APTP otorgó unos viáticos de $30.000 a todos los inscriptos a aquella carrera. La ayuda hizo su efecto. En octubre del 2019, cerca de 100 autos participaron de la fecha en territorio misionero.    

Los nuestros

La categoría supo siempre tener presencia santacruceña. Muchos y buenos fueron los pilotos que pasaron por el TP. Algunos dejaron más que su marca. Tal es el caso de Gastón Grasso y Pablo Collazo Hijo, quienes fueron campeones en el 2011 y 2014 respectivamente. Ahora los que están continuando con el legado, intentando hacerlo con el mismo éxito, son Cristóbal Riestra y Thiago Martínez. El primero estuvo presente en las dos primeras pruebas del año. Las únicas, también, que se corrieron hasta acá.

Sin la deseada suerte para el capitalino, que tuvo problemas con el Clio y debió abandonar tanto en Buenos Aires como en Alta Gracia. Para terminar con ese sufrimiento, Riestra tiene pensado ya subirse a un flamante Ford Fiesta Kinetic en la reanudación del certamen.

Martínez arrancó el 2020 un poco después. Faltó a la prueba del Gálvez y sí estuvo en la que tuvo lugar en el Cabalén. Allí, el también capitalino, fue quinto. Siendo esta, la mejor marca de un santacruceño en lo que va del año en la categoría.

Los dos se encuentran ahora esperando ver qué pasa con el coronavirus y la cuarentena. Mientras aguardan, están entrenando el físico y perfeccionando el manejo en el simulador. Todavía la vuelta a la actividad es incierta.